En un principio el animal mostró miedo y rechazo. Después terminó gozando ruidosa y efusivamente. La norteamericana Anna Paterek iba paseando sobre su caballo llamado Magic, cuando quiso llevarlo a cabalgar al río. El problema fue que el caballo parecía tenerle miedo al agua y no podía acercarse a la orilla. Por lo mismo, su dueña se desmontó y le mostró cómo entrar al río. Una vez que el animal lo logró, no pudo esconder la emoción que la nueva experiencia le produjo. Fte.
a mis caballos tb les gusta el agua que hay en el riachuelo de mi fundo... mentira... eso es para weones con caleta de plata no más y con cuea me da pa echarle bencina al toco