¿Sabía usted qué hace 100 años los tatuados eran un fenómeno de circo? Sí, así como lo escuchan y hoy día la situación apenas ha cambiado. Seguramente muchos han visto revistas o documentales donde hombres y mujeres han tomado la decisión de convertir su piel en lienzo andante, marcándose a sí mismos con una obra de arte muy personal. Pero así mismo como estas personas han decidido publicar su medio de expresión, otras tantas han decidido no aceptarlo, ni tolerarlo. Se sabe de corporaciones que restringen de manera autoritativa los tatuajes, perforaciones y modificaciones. Personas capacitadas que aspiran a un buen trabajo, se le es negado por el hecho de tener incluso cicatrices, no se diga por tener un tatuaje visible. Esto sucede abiertamente nuestro país, la discriminación contra el arte corporal es una situación muy común, y lamentablemente nadie intenta hacer nada para cambiarla. Es una pena que un país tan rico y lleno de diversidad cultural no pueda aceptar este modo de expresión y hacerlo suyo. Les voy a hablar sobre la nueva situación del arte corporal, tatuajes, piercing y modificaciones extremas. Trataré de hacerles llegar un entendimiento sobre el arte, que más que una mutilación, es un modo de expresarse, en muchos casos se expresan sentimientos imposibles de explicar con palabras. Hablaré sobre las nuevas condiciones que rodean los procesos, desmentiré mitos y leyendas que se dicen de boca en boca y hablaré con las verdades que no todos pueden aceptar. Que el arte corporal no degrada ni mutila el cuerpo, es tan válido como cualquier otro medio de expresión. El principal mito que rodea estas prácticas es sobre la donación de sangre; se dice que ya no se puede donar sangre nunca, sin embargo esto es mentira, en países desarrollados se da el margen de 6 meses a un año de espera para el donativo, ¿y cómo es esto posible? Esto es porque la tinta nunca llega al torrente sanguíneo, la tinta no es el factor de riesgo nunca. Sin embargo se toma como medida de precaución por cualquier enfermedad o infección que se pudiese haber contagiado durante el proceso, cosa que no debiera suceder de ser un sitio con las medidas de higiene adecuadas. Son 6 meses los que se necesitan como mínimo para que cualquier enfermedad incube y sea registrable un resultado preciso. Realmente el que te permitan o no el donativo depende totalmente del criterio de quien esté a cargo del banco de sangre local y de su prejuicio hacia estas prácticas tan comunes hoy día. También se dice que el dolor es insoportable, no se diga con colores blancos o claros, y necesitas ser drogadicto o delincuente para soportarlo, esto es una mentira. ¿Duele?, claro que duele, como cualquier raspón, como cualquier penetración en la piel. Pero el dolor es tolerable y al final pensarás en que no duele tanto. ¿Entonces por qué los colores claros duelen tanto? Esto es así porque como con cualquier pintura el blanco da luz a la obra, sin embargo no puede ponerse al inicio porque el resto de los colores lo mancharían y se perdería la intención del color, y al final del proceso la piel es ultra sensible y es natural que se crea que duele más esa tinta, pero es la sensibilidad de la piel que se hace notar. ¿Que los tatuadores son delincuentes? Creo que eso es una de las mayores dudas al respecto, y es válido ya que de cierto modo dentro de ese ambiente donde muchos inician es entre malandrines, pocas veces los conocedores de arte irán con un principiante por algo elaborado y con detalle, entonces estos se valdrán de quienes les permitan practicar con piel viva. Sin embargo hay diseñadores gráficos, licenciados en artes gráficas, licenciados en artes visuales, escultores, pintores, estudiados en artes y otras materias que toman el tatuaje como una vocación, otro toman el piercing o la modificación corporal, esto no los vuelve groseros. Lo que el artista hace es darse a respetar ya que muchos creen y dicen que es fácil, sin embargo se ha de estudiar y conocer la máquina, las tintas, técnicas y toda la herramienta de la que puedan disponer y coordinar el uso de todo esto para lograr un tatuaje, piercing o modificación corporal idónea. Y no debemos olvidar que todos estos factores evolucionan día con día. Siempre hay algo nuevo que aprender, algo nuevo que probar, nuevas técnicas que practicar. La realidad es que el tatuador nunca deja de ser aprendiz. Bien se dice que lo más valioso en este mundo no es el dinero, si no el conocimiento y la información. Y más importante aún es la aplicación que se le da a todo este conjunto de cosas. Se ha hablado mucho sobre la extirpación del tatuaje, solo puedo decir que la tecnología avanza cada día más, en países desarrollados es algo así como una operación de rutina, sin embargo hablamos de que en México los procedimientos son muy arcaicos y dolorosos, además de costosos. Así que quitarte un tatuaje implica un proceso con un costo aún mayor que su aplicación, y más dolor. La verdad es que tatuarse duele, cuesta dinero, puede que no a todos les guste y es válido, sin embargo debe cambiarse la idea errónea que se tiene sobre quiénes son los que se tatúan o se modifican el cuerpo. Rechazan a la enfermera con una mariposita en el hombro, discriminan al ingeniero con un tribal en las costillas, despiden al administrador con el retrato de su madre en el pecho; pero no dejan de ver cine, ni novelas con actores con tatuajes, no dejan de escuchar, ni de comprar boletos para las bandas con integrantes tatuados. No es más malo el delincuente tatuado, lo es quien deja sin sustento a una familia por discriminación y prejuicios sin sustento ni argumento. Pero estamos hablando sobre mitos y realidades, pero, ¿Y el proceso? ¿Usted sabe cómo elegir un tatuador? Porque usted elegirá a la persona que crea adecuada para plasmar una imagen en su piel. Debe tomar precauciones, preguntar por todos lados, pedir recomendaciones, exigir un portafolio de evidencia y antecedentes del profesional que lo va a tatuar, a perforar o a modificar. Debe informarse previamente sobre la higiene y los procesos, porque tiene derecho a preguntar y a saber lo que se le va a hacer, su imagen y su salud están en manos del profesional. No se entregue totalmente al artista, usted puede sugerir, preguntar y pedir informes. Por favor hágalo, la cultura de la modificación corporal está creciendo en el país y está en los buenos clientes el que haya buenos artistas. Y con esto llegamos a los artistas; se dice que no existe tatuaje caro, más que el que no te gusta. Y es totalmente cierto, Puedes pagar miles de pesos por algo pequeño, pero te parece justo cuando sabes que eso es lo que quieres y sabes que quedará como tú lo quieres. Porque así pagues $100 por la cosa más grande del mundo, puede ser que llegues a odiar ese trozo de tu piel toda tu vida sólo porque no quisiste pagar por la experiencia o la calidad de un artista. Sin embargo nunca olviden pedir referencias. A veces el precio es engañoso porque hoy día afortunadamente los estudios dejan de ser clandestinos, pero es un sinnúmero de cosas las que se han de tener en cuenta antes de nada y nadie más que usted será responsable de usted mismo. Con esto creo haber tocado los temas que más dudas generan, sin embargo todos somos libres de buscar más y más información. Por mi parte me siento satisfecha de haber tenido esta oportunidad de esclarecer dudas y solicitar un llamado a la tolerancia y al respeto por el cuerpo ajeno. Nunca olviden que hay de hacer el bien sin mirar la piel.
