El simbolismo de la calavera es instintivo para el ser humano. La mente humana, especialmente preparada para reconocer caras, capaz de ver expresiones en puntos y rayas o sencillos signos de puntuación (como los famosos smileys), sabe instintivamente que la "cara" que nos mira en la calavera fue una vez un rostro humano. Las cuencas de los ojos de la calavera, de mayor tamaño que unos ojos vivos, llaman nuestra atención aunque intentemos evitarlo. Un calavera a pesar de obviamente de carecer de vida, y no ser en realidad más que un objeto inanimado, ejerce sobre nosotros una fascinación mucho mayor que cualquier otro hueso del esqueleto humano, un magnetismo que puede tanto atraernos como resultarnos repulsivo. Saludos, espero les guste el tema