Los bots conversacionales forman ya una parte imprescindible de la tecnología actual. Los tienes ahí, en tu propio móvil u ordenador. Si les haces una pregunta te la responderán como una persona, y si les pides que hagan una gestión online la harán por ti. De hecho, empresas como Google, Microsoft, Facebook o Amazon están invirtiendo amillones en seguir desarrollando esta tecnología. Con todo, es fácil llegar a la errónea conclusión de que estos conceptos son relativamente modernos. Nada más lejos de la realidad, porque este tipo de aplicaciones conversacionales nacieron a la vez que la propia computación. Por eso hoy os vamos a hablar de ELIZA, el considerado como primer bot de la historia. ¿Qué son exactamente los bots? En esencia, los Bots, Chatbots o Chatterbots son piezas de software diseñadas para responder de forma automática y coherente a lo que les decimos o escribimos. Reconociendo determinadas palabras o expresiones, son capaces de interactuar con nosotros respondiendo de forma parecida a como lo haría otro humano. Los bot conversacionales pueden utilizarse para muchas cosas. Las empresas pueden utilizarlos para automatizar la atención al cliente, tu móvil puede responder a las preguntas que le hagas gracias a ellos, se crean servicios de información metereológica o de tráfico con ellos, e incluso en tus aplicaciones de mensajería los hay con los que puedes hablar, informarte o jugar. Si estos bots son capaces de tener interacciones similares a las de los humanos, es principalmente por hacer uso de dos tecnologías concretas como la inteligencia artificial y el procesamiento del lenguaje natural. Con ellas, los bots actuales procesan lo que les estamos diciendo y a saben contestar de una manera que consideremos natural. Sin embargo los inicios de este tipo de programas son mucho más humildes. Todo empezó con un profesor de informática del MIT que quería hacer una parodia de las preguntas que suelen hacer los psicoterapeutas rogerianos. No podía imaginar el éxito que acabó teniendo su proyecto ni la manera en la que ha ido evolucionando con los años. La historia de ELIZA, el bot psicólogo Joseph Weizenbaum, creador de ELIZA. La historia de los bots comenzó a escribirse varios años antes de que se programase el primero de ellos. Fue en los años 50 del pasado siglo, cuando el genio británico Alan Turing empezó a considerar la posibilidad de que las máquinas llegasen a pensar. En 1950 diseñó el Test de Turing, un postulado teórico con el que aspiraba a poder comprobar si una máquina tiene comportamientos inteligentes similares o indistinguibles del de un humano. Su trabajo inspiró a muchos científicos informáticos, entre ellos el alemán Joseph Weizenbaum del MIT. Partiendo de esa idea de máquinas capaces de comportarse como humanos, en 1966 desarrolló un programa con el que pretendía ser capaz de engañar a los humanos haciéndoles pensar que estaban hablando con otra persona. Se llamaba ELIZA. ELIZA fue diseñado como un método para mostrar la superficialidad de la comunicación entre el hombre y la máquina. Lo hacía reconociendo palabras clave y preguntando sobre ellas como si fuera un psicólogo. Por ejemplo, si alguien mencionaba la madre en una frase, el bot automáticamente le pediría que le dijese más sobre su familia. De esta manera se creaba una ilusión de entendimiento e interacción real. Para llegar a ese resultado Weizenbaum, primero tuvo que identificar cinco problemas técnicos fundamentales que ELIZA tendría que superar. Estos eran la identificación de palabras clave, el descubrimiento de un contexto mínimo, la elección de transformaciones apropiadas, la generación de respuestas adecuadas o la capacidad de reaccionar ante la ausencia de palabras críticas. El resultado fue el que se considera el primer bot conversacional de la historia de la ciencia computacional. Lo fue antes incluso de que se acuñara el término ‘ChatterBot’ tres décadas después para definir los programas conversacionales. Uno de los muchos chatbots basados en ELIZA que siguen poblando Internet. Existe el mito de que ELIZA era capaz de superar el test de Turing. Pero hay que tener en cuenta que el test inicial de Turing es un postulado teórico con diferentes interpretaciones, y que hasta la creación en 1991 de la plataforma de pruebas del Premio Loebner no se estableció una especie de estandar para este test. Por lo tanto, decir que ELIZA lo pasó es un poco aventurado, porque pudo haber interpretaciones del test intencionadamente dirigidas a que fuese o no fuese así. Con o sin el test, ELIZA consiguió engañar a muchas personas que creían que estaban manteniendo una conversación con una persona real. Tanto que el propio Weizenbaum se sorprendió al ver la manera en la que algunos incluso llegaban a confesarle intimidades a su programa informático cuando este les hacía una pregunta. Por eso, aunque Joseph Weizenbaum murió el 5 de marzo de 2008, su legado sigue estando muy presente en nuestra actualidad. No sólo por los actuales asistentes virtuales, tataranietos de ELIZA, sino porque su propio asistente ha seguido replicado y evolucionado, y en la red podemos encontrarnos con diferentes imitaciones basadas en él. De entretenimiento a servicio Conversaciones con SmarterChild en 2002. Durante las décadas siguientes a la creación de ELIZA los bots siguieron desarrollándose, aunque aún en estado embrionario. En ese tiempo fueron naciendo nuevos bots que recogían su testigo, como A.L.I.C.E., Mitsuki o Albert One, todos ellos con funciones básicas en las que se limitaban a mantener conversaciones con más o menos acierto. Pero todo cambió a principio de la década de los 2000 con la llegada de SmarterChild. Este programa no era sólo un bot conversacional, sino casi un primer boceto de asistente virtual que llegó a ser compatible con AIM, MSN Messenger, AOL Instant Messenger e ICQ, y que supuso la introducción a la inteligencia artificial para millones de adolescentes. Lo que más destacó de este bot no fue su enorme capacidad para procesar el lenguaje natural, entendiendo y respondiendo de forma sorprendente casi todo lo que se le decía. Lo que realmente lo empezó a cambiar todo era que también sabía echarte una mano. Le podías pedir que te dijera citas, que te diera los horarios del cine, la previsión metereológica y otra información de interés. Podemos decir por lo tanto que fue uno de esos programas que marcaron la transición de los bots conversacionales, que pasaron de ser un simple entretenimiento a convertirse en un método para ofrecer diferentes servicios. Vamos, que marcó un camino que años después han ido puliendo las grandes empresas tecnológicas. Fue por lo tanto un bot adelantado a su tiempo, una especie de padre para los Siri, Cortana o Google Now que hoy habitan en millones de dispositivos. Y es que es ahora cuando parece que los bots están empezando a salir de ese estado embrionario y empezar a demostrar de lo que son capaces las bases sentadas por Turing y Weizenbaum. XATAKA SALUDOS PORTALIANOS!
Interesante aporte, pero por lo menos yo los odio. No los que se encuentran en internet con propósito lúdico, no esto que encontramos en la vida diaria en forma de la atención al cliente de la compañía telefónica ( pulse 1 si...). Peo por suerte hay una forma de hackearlos de forma sencilla,: Cuando pregunta por lo que quieres, simplemente balbucea algo incomprensible, entonces te dice que no te entenduó y que repites tu consulta. Vuelves a balbucear cosas sin sentido, y, o milagro, a la tercera o cuarta te responde un ser humano de carne y hueso. En caso de limitarse a pulsar teclas, basta con pulsar una fuera de las opciones con el mismo resultado final. Quizás algún día hay bots que permiten una conversación medianamente inteligente, pero mientras tanto sólo sirven, pues esto, como entretenimiento en internet.
Me sorprende tu respuesta qla tan basica Por que este bot no solo escucha cuando le haces una pregunta a través del buscador de Google, si no que está activo las 24 hrs del día escuchando todas tus conversaciones familiares con amigos etc el micrófono del celular tiene buen alcanse hagan la prueba metanselo al bolsillo y graben , este bot lo que hace es reunir información de todo lo que pronuncias, y lo reordena y distribuye mediante algoritmos dentro de todas las páginas que visitas, así que ni te sorprenda la gran coincidencia de gustos y material que te vas a encontrar en internet Referente a tus gustos, Claro que no siempre es así por que también existen las cookies que son más viejitas
Si, conozco la política de estos bots y spiders que pululan por los redes sociales y foros de los diferentes buscadores para esto, runir informaciíon para su propósito como buscaores. Por esto saben tu preferencia en la música y en tus búsquedas. También conozco a los bots de Anonymous,, CtrlSec y NSA, que hay por redes sociales, como FB, Twitter y otro, buscando palabras claves que dan indicios del terrorimo u otros, los de Google, para poner anuncios acorde con tus gustos (asi se ganan su pan). Todos estos bots conozco de sobra, por esto mis costumbres en la red se ajustan a este conocimiento, con el resultado que los datos almacenados en el dashboard de Google y otros no coinciden en nada con la realidad. No soy novato en esto, te lo aseguro, y bots son bots, autómatas que hacen su tarea, incapaz de deducciones más alláde su capacidad programada de palabras claves y por tanto (todavía) fácil de engañar.
Sin nombrar también que hay gorditos ojerosos ocupando metasploit, o recursos más viejos como poison ivi, para crear una conexión Remota, no sé si en la play stores y sus aplicaciones ocuparán bots, pero creo que en las aplicaciones con menos descargas debe haber algún personaje haciendo mal uso de tus archivos, x eso es importante descargar aplicaciones sin permisos si es que usamos Android Rootear el celular denegarle permisos a wasap blokeando micrófono, lectura de contactos, de cámara, todo por que de todos los programas este es el más invasivo en cuanto a bots se refiere, Google también invade tu privacidad con bots así que mejor denegarle todos los permisos desde configuración de dispositivo si es en Android o directamente desde el mail si es en pc, Ammm. Podría estar toda la noche hablando de esto pero no quiero dar la lata En mi caso personal los programas que uso cuando no los estoy ocupando cierro todos sus puertos para evitar una posible puerta trasera, por ejemplo wasap si lo ocupo habro su puerto cuando lo voy a revisar, pero cuando no lo ocupo lo mantengo cerrado sin datos de transmision, aparte de tenerle denegado todos los permisos uso de micrófono de cámara leer contactos etc, aparte de agregar que todas las fotos y música por mui comunes que parezcan son puros scripts modificados, osea que si algún newbie se a metido a mi sistema para robar algún archivo este por sí solo se a infectado por que esa fotografía o música que tenía era un virus una modificación mía, por lo que en cualquier momento creando un servidor no IP y haciendo uso de ese archivo podría tener acceso completo a la máquina que me quiso hackear
El mcro no me importa, hablo poco en la compu, la cámara de mi laptop está tapada cuando no la uso, los sitos oficiales usan su propio teclado en pantalla, mis contraseñas son seguras y complejas, tengo actualizado todos los programas del sistema y ayer mismo mi antivirus actualizaba su versión contra actuales rootkits, blindando también el directorio raiz/ boot que incluye en su escaneo, aparte mi WinPatrol me avisa de cualquier intento de efectuar cambios en el inicio, sistema o registro sin mi consentimiento. Google, aparte de los datos del registro, después de tantos años sabe bien poco de mi y como buscador habitual suelo usar más al DuckDuckGo Virus y malware existen casi tanto tiempo como existe la informática, antes de internet prevalecieron más los que machacaban el sistema a secas y menos los spyware como ahora. Buen ejemplo en el 99 el virus W95/CIH, más conocido como Chernobyl, lindo bicho que borraba el disco duro de cabo a rabo, sobreescribiendolo con datos aleatorios y lo peor, hacía lo mismo con el BIOS, convirtiendo el equipo en un pisapapeles, que requería para restaurarlo un cambio físico de componentes.
No es así, usa los datos de Google y Bing, pero no guarda tus preferencias de búsqueda como estos y por esto los resultados están en el orden como están en los bases y no como tu lo quieres. Tiene sus ventajas para la privacidad y para descubrir sitios nuevos, pero a coste que a lo mejor tienes que ir a la página 2 o 3 para encontrar el sitio que pretendías y que en Google aparece al principio, porque conoce tus hábitos. La diferencia es esta. Esto si, si lo usas la primera vez, dbes tener en cuenta que por defecto tiene activado el filtro de contenido ofensivo o de adultos, que tienes que ajustar o quitar primero
