Dos semanas

Tema en 'Rincon Literatura' iniciado por Kaeleme, 21 Nov 2017.

  1. Kaeleme

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    Se asomaba a la venta, sólo para ver si la chica estaba allí... en efecto, ella también miraba por la ventana. La distancia entre las casas no superaba los 30 metros y sus vistas se topaban. Él no soportaba la vergüenza y cerraba la cortina, luego se asomaba poco a poco para ver si ella seguía allí. Fueron 2 semanas que sintió ser otra persona. Cuidando una casa ajena con su madre, Javier pasó unas inolvidables vacaciones. La chica de la casa de en frente se llamaba Rita, tenía 14 años y una cabellera roja que hipnotizaba a Javier cada vez que la veía. Nunca jugaron juntos, él era tímido y a pesar de que los niños del pasaje lo invitaban a jugar, él prefería quedarse en casa y observarlos desde el segundo piso. Allí conocía a la niña, una hermosa niña, tal como le gustaban, tez blanca, cabello largo y unas pecas en sus mejillas.

    Él siempre se consideró un niño feo, así mismo se lo hicieron saber sus compañeras en sexto básico, al crear una lista con las características físicas de los muchachos y él clasificaba en los "feos". Con aquel estigma, no se atrevía a enfrentar a la muchacha que le robó el corazón.

    Pasaban los días y el seguía mirando por la ventana, viendo a los chicos jugar junto a la ninfa que se movía entre los mortales. Ella se dio cuenta de la situación y subió al segundo piso de su casa para poder verlo de frente. Allí sus miradas se topaban, aunque fuese un instante, Javier sentió un júbilo inmenso.

    Así siguió la situación, él mirando desde la ventana como jugaban... un día, uno de los chicos lo llamó con mucha insistencia, Javier bajó las escaleras y salió a su encuentro.

    -Sabes, la Rita dijo que le gustabas...- Él muchacho no cupo de alegría, sentía que iba a explotar por aquella aseveración. Agradeció el mensaje y salió al pasaje para ver si su amada se encontraba allí... la buscó por varios minutos y no la encontró.

    -¿Dónde esta ella?- Preguntó con un tono angustiado y temeroso?
    -Se fue de vacaciones- Respondió uno de los niños del pasaje.

    Con la mirada en el suelo, Javier volvió a la casa, subió a la pieza en el segundo piso y se asomó por la ventana, tratando de encontrar aquella esperanza perdida en el otro ventanal.

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