La modelo fue trasladada al hospital del trabajador donde “esperé dos horas que me atendieran”, luego de que el dolor fuera insoportable el doctor de turno la sometió al tratamiento de rigor. “Me tuvieron en observación, me pusieron un cabestrillo y me dieron antiinflamatorios”, cuenta la muchacha quien a solo horas omitió las indicaciones del profesional y se sacó la venda para volver a ensayar. “Yo tengo siete vidas, soy una felina (ELLAAAA, LA GATA FIERA!)…pero no la cuento dos veces, estábamos haciendo un lift y Alfredo mi bailarín no me pudo sostener y caímos al suelo”, se defiende ella relatando lo ocurrido, agregando que “los golpes son golpes, por suerte mis huesitos están bien y no es por ser irresponsables pero de repente los doctores exageran y ahora me siento bien”. "Oye, cuidado, no te vay a caer..." Saludos