Ron, ron, ron, la botella de ron

Ron, ron, ron, la botella de ron


El Ron, mencionado por primera vez en documentos provenientes de la isla de Barbados allá por 1650, fue la bebida predilecta de los filibusteros piratas que en el siglo XVII, formaban parte de los grupos que actuaban en el mar de las Antillas.

En la Real Armada española, el ron era utilizado sólo en contadas ocasiones, y lo normal era beber vino en las raciones, de una graduación alcohólica mucho menor. En cambio, la historia del ron en la Real Armada de Gran Bretaña fue en gran medida un cambio social, tanto para Inglaterra como para la Royal Navy.



Durante más de 300 años, la Royal Navy publicó un diario de “Tot de Ron Pusser“, a las tripulaciones de sus barcos, donde siempre se recomendaba ‘una doble antes de la batalla y otra después de la victoria‘. El nombre de Pusser es simplemente una corrupción de la palabra sobrecargo. A bordo del barco, el sobrecargo fue el responsable de las provisiones del buque, incluido el ron. Todo lo que vino del sobrecargo se le llamó Pusser.

Durante siglos las raciones de ron para la tripulación de la Royal Navy fueron de ley, la vida a bordo era extremadamente difícil y la tripulación necesitaba un aliciente. Una motivación extra que consiguió incluso desbancar a la cerveza que fue la bebida de primera necesidad de la Royal Navy hasta el siglo XVII. Claro está que ha medida que los horizontes del imperio Británico se ampliaban, se convirtió en imposible la preservación de la cerveza en barricas durante largos periodos de tiempo. Vinos y licores comenzaron a ocupar su lugar a partir de 1655.




La cantidad de ron asignada fue cambiando a medida del paso del tiempo. Antes de 1740, se publicó una orden para que los hombres recibieran medio litro de ron puro dos veces al día en su dieta etílica ordenada. Los hombres llegaban a tal estado de embriaguez, que el Almirante Vernon, comandante en jefe en las Indias Occidentales estaba muy preocupado, con lo que él llamaba el vicio de la embriaguez porcino, ya que a su juicio se debió al no mezclar el ron con agua. “La perniciosa costumbre de los marineros bebiendo su asignación de ron en chupitos y con frecuencia, se presenta con muchas consecuencias fatales para su moral, así como su salud“.

Así que a partir del 21 de agosto de 1740 se volvió a crear una resolución de los capitanes infames donde se señalaba la cantidad diaria de ron, “Cada día se mezclará con la proporción de un cuarto de galón de agua y media pinta de ron y se llevará a cabo en la cubierta en presencia del teniente de la Guardia, que tendrá que tener especial cuidado para que los hombres no sean defraudados en su asignación completa de ron“.



Este riego de agua sobre el ron ofendió a muchos de los hombres que veían mermada su ración por derecho, además de sus cualidades soporíferas que le hacían ser sin reparos, los esclavos de todas las pasiones brutales.

A partir de 1756 la ración diaria se incrementó a dos partes de agua y una parte de ron, un litro por día y por hombre. Ron Pusser se convirtió en una forma de moneda, una manera de pagar viejas deudas o para recompensar a un compañero de un favor, incluso en los juegos de cartas se admitían raciones de ron.



Durante siglos los marineros británicos disfrutaron de su tot, como un acontecimiento social y legítimo…Pero como era de prever esa tradición se acabó hace 40 años, el 31 de julio de 1970, día conocido en la marina como el Día Negro Tot, la dosis de ron fueron retiradas para siempre de la vida de la Real Armada de marineros.

Fue un cambio radical y para muchos un infierno, pero el estado de alerta mental y la valentía necesaria para envasar una bala de cañón son muy diferentes a las exigidas para operar las armas modernas de hoy,…supongo que es de lógica, aunque quizás no lo fue para la opuesta personalidad británica.



La junta del Almirantazgo decretó que no había lugar para la emisión diaria de ron en una marina moderna, y así terminó una de las más largas tradiciones marineras interrumpidas en la historia, con un último Tot Pusser en todos los navios, donde muchos hombres derramaron una lágrima por la muerte de una tradición tan vieja. Para muchos viejos lobos de mar fue el comienzo de una jubilación anticipada.

Según el Dr. Van Der Merwe, editor del Museo Marítimo Nacional, “Todo el mundo se ahoga, si los marineros están borrachos todo el tiempo“….por fin podremos preguntar, ¿Que hicieron con el marinero borracho?…

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