Una mujer ha demandado a un hospital, después que una operación fallida la dejó incapaz de sentarse por tres años. Linda Burgess, de 49 años, no puede doblarse por la cintura y pasa en una jornada agotadora de 16 horas al día, en pie después de una histerectomía fallida. Lo hace de pie todo, incluso comer y ver televisión. Y cuando la madre de dos hijos quiere usar el baño, toma morfina por el dolor que esto le provoca. Linda perdió su trabajo como administradora de la universidad, porque ya no podía sentarse en su escritorio. Ella cree que los cirujanos desgarraron los nervios en su estómago, durante una operación en el 2007. Linda dijo: Mi vida ha sido un infierno desde la operación. No puedo sentarme en el coche o agacharme para colocarme la ropa e incluso vestirme por la mañana es doloroso. Mientras que mi familia se acurruca en el sofá para ver la tele, yo me tengo que apoyar contra una pared en la esquina. No han logrado detener el dolor, debe inyectarse medicamentos costosas para adormecer temporalmente los nervios en el estómago e incluso, el apéndice se le quitó. Ahora Linda, que vive en Leicester con su esposo Kevin un electricista, de 51 años, y dos hijos ha emprendido acciones legales contra el hospital. Fuente: thesun
pobre señora, vivir asi el resto de la vida, que terrible u.u. ojala les salga tobo bien con las justicia contra el hospital y aseguren 4 generaciones de la familia como minimo¡¡