Aca les dejo ocho mandamientos a respetar y practicar sin moderación para que Nos dejen locos jajaj... 1- Aceptarás tu cuerpo: Todas tenemos nuestros pequeños o grandes complejos, pero no por ello vamos a recordarlos permanentemente. Nada menos excitante para un hombre que una mujer que en el momento crucial dice: "¡No mires mi celulitis! O ya se que mi pecho es pequeño, menos mal que existe el Wonderbra ". Tu chico no está ahí en esos momentos para decirte que no te preocupes sino para compartir contigo un momento de placer. Ponte en su lugar, ¿cómo reaccionarías ante un hombre que estuviese desvalorizándose o quejándose todo el tiempo de sus defectos? Se te acabarían quitando las ganas ¿no crees? Si está contigo en ese momento quiere decir que le gustas por algo, así que deja de esconderte tras una camiseta y no cortes la respiración para esconder la pancita! Cuanto mejor te sientas con tu cuerpo, más disfrutaran del momento los dos. 2- Aprenderás a Exitarlo: De lo que se trata es de aumentar el deseo y eso está al alcance de todas: un escote de vértigo, una mirada pícara y seguro que se derrite a tus pies. Tiene que ser una invitación al placer que le haga perder la cabeza. Todo empieza cuando el gesto más mínimo es una promesa de placer intenso. Tómate tu tiempo y no te olvides que cuando te haces de rogar el deseo aumenta aún más. No cedas a tu deseo desde el principio, pero demuéstrale que estás interesada. Enciende la mecha pero no hagas que explote enseguida y sobre todo no dejes que se apague. ¡Merecerá la pena al final! 3- Dejarás que mire: Desde pequeño le gustaba ver las páginas de lencería del catálogo de Avon de su madre. A los hombres les gusta mirar y su deseo pasa por la mirada. Así que ¿Por qué privarle de ese placer? No apagues la luz (¡sólo se aceptan algunas velas!) y déjate ver, concédele el placer de mirarte. No dudes en posar de forma sugerente y en destacar algunas partes de tu cuerpo: retira tu sujetador y no cruces los brazos sobre tu pecho y sobre todo no cierres los ojos: aprovecha para disfrutar del espectáculo, ¡el hecho que sus miradas se crucen es un verdadero estimulante! 4- Conocerás sus zonas erógenas: Al igual que la mujer, el hombre no se limita a su sexo y posee numerosas zonas erógenas (puntos anatómicos que una vez estimulados, provocan una excitación sexual). De hecho se suele quejar que no nos ocupamos lo suficiente de ellos. Aprende a conocerlos para explorarlos mejor. No olvides poner en práctica ciertos verbos para excitarle: besar, acariciar, mordisquear, chupar, lamer Todo (¡o casi!) salvo sus óganos genitales Los labios, el cuello y para algunos las orejas pueden transformarse en auténticos detonadores de placer. Tampoco hay que olvidar el interior de los muslos donde la piel es muy fina, los pezones y sus nalgas que nos encanta mirar- también merecen que nos ocupemos de ellas ¡y haz que estremezca de placer! 5- Explorarás su punto H: Su apelación divide a los especialistas, ¡pero para poder diferenciarlo del famoso punto G femenino, nos quedaremos con la letra H de Hombre! Situado cerca de la uretra y de la próstata, al interior del recto, sobre la parte que separa el cuerpo del pene y el ano. No siempre resulta fácil de alcanzar, pero con un poco de entrenamiento y lubricante sexual, nada es imposible. Para conseguirlo, introduce un dedo en el ano de tu pareja y remonta delicadamente la pared rectal. Si sientes una pequeña parte prominente de la talla de una avellana habrás dado en con él. Hay que manipular con precaución esta zona, que promete el orgasmo al masajearla delicadamente pero con firmeza hacia abajo. 6- Expresarás tus deseos: Es cuestión de expresar los deseos y el placer. Una estimulación que anime a tu pareja y que le llevará también hacia el camino de tu éxtasis. Para las más tímidas, los suspiros de satisfacción y los susurros con las indicaciones: por aquí, un poco más abajo, más arriba, si ahí ya supondrán un gran paso. Las más atrevidas serán más específicas con sus indicaciones: Me gusta cuando me acaricias el pecho, me vuelve loca cuando me besas entre las piernas ¡Una vez que entres en el juego, te sentirás menos inhibida y te sorprenderás a ti misma utilizando palabras subidas de tono! Los dos tenéis mucho que ganar, él se sentirá halagado y se animará cada vez más. Son muchos los que admiten que les excita cuando su pareja utiliza palabras muy directas o con los gemidos de satisfacción de una mujer. No pierdes nada, al contrario, le enseñarás lo que realmente te excita. 7- Harás que se sienta en confianza: Al contrario de la imagen que pueden dar algunas veces, todos los hombres tienen dudas sobre su comportamiento en la cama y pueden quedarse bloqueados ante una experta sexual. Necesitan sentirse en confianza. Demuéstrale que él es el único objeto de tu deseo y es el único ser en la Tierra que te excita hasta ese punto. Dile cómo te gustan sus caricias y ciertas partes de su cuerpo. ¡Le costará dejar a una mujer que sepa valorarlo tanto! Ser demasiado directa no sólo puede asustarle sino que además puede provocar que la relación sexual sea rápida y deje una sensación de frustación. Aprende a tocarlo con delicadeza y no pongas de entrada la mano directamente en su sexo. Los hombres también necesitan un acercamiento con suavidad. Acaricia delicadamente su nuca o sus caderas para empezar... 8- Tomarás iniciativas: Los hombres se quejan a menudo que suelen tener que dar el primer paso cuando se trata de relaciones sexuales. Les gustaría que las mujeres tomasen más a menuno la iniciativa. Así que lánzate y dale a entender que te apetece hacer el amor. A veces una mirada y una sonrisa cómplice es suficiente para pasar el mensaje.
Aaaaaaa! que soy seca :H:H yo hago todo eso :H, yo doi el primer paso, y a mi novio le encanta eso! siempre me dice que mina como yo? hay pocas :H, porque soy dominante y dominada! eso es rico!* cuando es de a dos! y no solo de a uno, porque dejarse querer, si te pueden querer y querer?* eso es mas rico y se disfruta mas!*
ando serca,casi,casi claro q el punto h como q nose si me daria la pasa,asi q voy a intentalo y ahi les cuento...