Algo tan cotidiano como un televisor con estática te puede reservar sorpresas espeluznantes. Ver para creer. Ya tienes un motivo más para dejar de ver tele. Estática en la televisión Imagínate que estás viendo la televisión, y de pronto la estática corta la señal. Pensarás que no hay de que preocuparse, pero yo te recomiendo encarecidamente que apagues el aparato de inmediato. En efecto, la mayoría de las veces en que eso ocurre no hay más que interferencias en la transmisión. Sin embargo en ocasiones (en muy contadas ocasiones, todo hay que decirlo) el ruido blanco tiene un origen diferente y da lugar a fenómenos extraños. Si miras la estática durante mucho tiempo, en un momento dado esta se parará. La habitación en la que estés se sumirá en un profundo silencio; todo sonido, desde el del televisor hasta los del cuarto y del ambiente exterior, dejará de escucharse. Si esto sucede no apartes la vista de la pantalla. Probablemente no lo notes enseguida, pero antes de que tu mirada se pierda fijamente en ese hormigueo de puntitos, tu cuerpo se congelará también. El tiempo alrededor tuyo y tú se pararán por completo. Como ya te estarás imaginando, esa no es estática como la que tú conoces. Los puntos negros y blancos cobrarán vida progresivamente, arrastrándose despacio alrededor de la pantalla al azar. Después se organizaran en una figura que se moverá frente a ti. Al rato verás que la estática regresa a la normalidad; el ruido característico del aparato volverá, y recuperarás el control de tu cuerpo. Una vez llegues a este punto te recomiendo que no vuelvas a mirar ese televisor. Por tu propio bien, ¡no vuelvas a utilizar ese aparato! Porque sólo mostrará estática, incluso cuando esté desconectado. Si se te ocurre la desafortunada idea de quedarte viendo el ruido blanco de nuevo, se producirá el mismo acontecimiento que te acabo de contar, pero con desastrosos resultados. Lo que pasa exactamente sigue siendo desconocido, ya que cualquiera que haya sido tan desafortunado como para experimentar esto, simplemente ha desaparecido. Se rumorea que si sigues mirando la estática otra vez los puntos blancos y negros empezarán a moverse de nuevo, pero tú no. Tus ojos estarán como paralizados en la pantalla, como si miraras una imagen cobrar vida, y te parecerá que la señal de tu televisor esté volviendo. Pronto aprenderás que ese no es el caso, porque todo el sonido sigue ausente y la pantalla mostrará algo familiar para ti: la habitación en la que estabas sentado. Lo único que lograrás ver después será movimiento en la televisión. Supuestamente te verás a ti mismo o a ti misma de espaldas y, posteriormente, la causa de tu desaparición.
