Esto lo escribí la Primera Noche Era un gato. Sí, era un gato negro. Aquel silencioso felino se pavoneaba por los rincones más oscuros de mi habitación, una séptima noche, rompiendo el absoluto silencio. Sus amarillos ojos se detuvieron en mi rostro de una manera tan lenta que llegaba a ser aterradora. Con agilidad su cuerpo se trasladó hacia mi cama, acercándose cada vez más. Me pidió sangre. Me pidió dolor. Me pidió soledad. Sangre, dolor, soledad; me asusté al escuchar la ronca voz del animal. Ronca y malsana, mis manos se enfriaron abruptamente al sentir sus palabras calar mis huesos. Repitió lentamente las tres cosas, una y otra vez, hasta que en un determinado momento me invadió una completa sensación de opresión, de rabia, de necesidad, de frustración; le dí tu nombre. Le dí tu nombre a gritos, y al pronunciar con mis labios aquellas inhóspitas palabras, el gato esbozó una sonrisa primitiva. Me había descubierto. De pronto el gato soltó un aullido que taladró mis oídos, un aullido que me hizo vomitar. Todo comenzó a dar vueltas. - Segundos después desperté sudoroso en mi habitación, temblando de frío. Me puse a llorar desconsoladamente: - Ya no quería más rencor.
^^ k nindu... ahi va mejor eso si aunke en esta silla me duele n la espalda.. es verdad me pidieron k me hicieran arto masaj xD como esta uteee primito regalon?
Si bien ^^ aqui con frio se me apago la estufa jaja me dio paha xD ir a echarle mas parafina ^^ uxis la extrañaba soy regalon suyo? :O