Los tatuajes de este tipo son poco habituales, ya que es una zona del cuerpo difícil de tratar. Son sitios del cuerpo donde la piel no tiene demasiada grasa (hipodermis), al igual que en codos y rodillas. Aunque no lo creamos, la grasa que hay bajo la piel nos ayuda a la introducción de la tinta. Al realizar el tatuaje debemos intentar estirar la piel lo mejor que podamos, una de las dificultades de estos tatuajes es su incomodidad a la hora de tatuar, se debe tener cuidado con no pinchar más de la cuenta ya que podemos causar el esparcimiento de los pigmentos. Cuando ya tenemos el tatuaje se deben tener una serie de cuidados, además de los habituales, por ejemplo, se debe lavar lo menos posible la zona y evitar guantes u objetos que hagan roce. En los tatuajes en los dedos de los pies, se debe que tener en cuenta que debido al sudor y el roce, la utilización de calcetines y zapatos son un obstáculo para su cicatrización. Otra cosa a tener en cuenta, es que manos, pies, codos y rodillas son zonas con menos hidratación y con más regeneración que el resto de zonas del cuerpo, por lo que el tatuaje perderá mucha calidad con el paso de el tiempo. Debido a la complejidad y el tamaño de la zona, los tatuajes en los dedos no suelen ser muy detallados. Son frecuentes las iniciales, anillos de compromiso o pequeños símbolos. Hay sin embargo algunos que se salen un poco de lo habitual ................