No le bastó con revelar la supuesta adicción al sexo de la joven actriz norteamericana al declarar que “era una salvaje en la cama” y “muy demandante”, sino que ahora Riley Giles, su ex novio, vendió fotografías de Lindsay Lohan que fueron sacadas mientras mantenían una relación que comenzó en el centro de rehabilitación Cirque Lodge de Utah, donde ambos se recuperaban de su adicción a las drogas. Las fotos se tratarían de imágenes de ambos y también de Lohan posando sensualmente frente a un espejo.