Muere anciano de 67 años por broma de 3 menores de edad.

Tres adolescentes británicos fueron sentenciados tras haber matado a un anciano de 67 años en una broma para YouTube. Se trata del “Happy Slapping”, una moda en la que se golpea a un desconocido para grabar la escena con un celular y subirla a la web.

El trágico desenlace que sufrió el inglés Ekram Haque no tuvo relación con un problema de salud, un accidente o sus propias acciones, sino que con la irresponsabilidad de un grupo de menores de edad que “jugaban” pegándole a gente en la calle con el fin de filmar la hazaña y subirla la red.
Esto forma parte de una negativa moda que se ha impuesto entre los jóvenes del Reino Unido llamada “Happy Slapping” (Cachetada Feliz) y que, hasta el momento, ha provocado múltiples heridas y dolores a quienes son blanco de la tortura.



Sin embargo, la cuestionable práctica llegó a su punto más negro ese fatídico día en que Haque paseaba con su nieta de 7 años a lo largo de las calles de Londres. De repente, los menores lo golpearon en la cabeza, cayo al suelo y se azotó la cabeza contra el pavimento.
Atónita, la pequeña niña se acercó a su abuelo para ver cómo estaba pero él ya había fallecido. A los pocos segundos, una serie de transeúntes se acercaron al lugar e incluso, el que parece ser un médico, tomó control de la situación alejando a la pequeña del lugar y tratando de ayudar al anciano que yacía tirado en la vereda.
Tras del ataque, los quinceañeros huyeron aunque, gracias a una cámara de seguridad que registró el hecho, se logró dar con su paradero.
Luego de una investigación en su contra, la justicia inglesa condenó a 4 años de prisión a dos de los involucrados y a un tercer adolescente a 6 meses por su relación en los hechos.


Por último, desde Universal informaron que el video circula actualmente por la web a pedido de la propia familia de Haque, quienes esperan que la popularidad del “Happy Slapping” llegue a su fin y no siga cobrando la vida de personas inocentes.



Estos weones en realidad estan enfermos y que se pudran en la carcel.