Gonzalo Cruzat vive enfermedad de otro hijo: “Se ve que es algo grave”

SANTIAGO.- El hermano mayor de Felipe Cruzat, el pequeño que falleció en abril de 2009 esperando un transplante de corazón, está internado en el Hospital Clínico de la Universidad Católica producto de una grave afección cardiaca.


José (a la izquierda), de 16 años, está siendo evaluado por el equipo médico del Hospital UC.
Foto: UPI

Se trata de José, de 16 años, quien está siendo evaluado por el equipo médico del recinto asistencial para ver la posibilidad de implantarle un nuevo marcapasos con un desfibrilador, según contó a TERRA.cl Gonzalo Cruzat, su padre.


“Está con un problema cardiaco bastante serio y con esto se quiere evitar un desenlace que no se pueda manejar. Él se chequeaba cada seis meses y ahora en junio apareció una falla cardiaca que se ha estado monitoreando, y la verdad que es bastante grave así que se decidió intervenir”, explicó.
Gonzalo Cruzat dijo que con este marcapasos resincronizador más el desfibrilador, su hijo puede mejorar la función cardiaca. Después de eso los especialistas determinarán los pasos a seguir.


“No estamos hablando de transplante, pero se está evaluando lo que viene por delante. Se ve que es algo grave y uno nunca se sabe hasta dónde llegan estas cosas”, precisó


Gonzalo Cruzat dijo que el marcapasos que actualmente tiene su hijo le fue implantado hace tres años cuando los doctores descubrieron que su frecuencia cardiaca disminuía en la noche.


“Dado los antecedentes de su hermano (Felipe) decidieron dejarle un respaldo por si hubiese un problema en el futuro que le provocara un paro cardiaco. A pesar de eso él no tenía limitaciones, sólo la precaución de controlarse cada cierto tiempo”, detalló.


La noticia caló hondo en la familia Cruzat-Solar que en un principio estaban bastante choqueados. “No esperábamos que José tuviera un problema cardiaco, además no tenía ningún síntoma, fue algo muy violento porque de repente aparece en los exámenes una falla”, relató el progenitor de José.


Gonzalo Cruzat dijo que la sola idea de volver vivir lo mismo que pasaron con Felipe es dolorosa, sin embargo, están tranquilos. “Esto es los que Dios nos tiene preparado, es la vida que nos ha dado y será por algo”, señaló.
Recordó que con Felipe todo fue especial y que por lo mismo confían en Dios y en que cada uno tiene su camino.


“Esperamos que el camino de José no sea tan doloroso, que podamos salir adelante y que él retome su vida”, finalizó su papá.