(Historia) El grande más chico del mundo.

El grande más chico del mundo


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EL PRIMER SCUDETTO. La gloria inaugural, en 1908. En los cinco años siguientes obtuvo cuatro títulos. El otro fue para el Inter.
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El Pro Vercelli es el quinto club con más títulos en el fútbol italiano. Sin embargo, tiene un estadio como el de Excursionistas y juega en la cuarta categoría. Vive de recuerdos: su último Scudetto lo ganó en 1922.

Cuando el fútbol nacía por los rincones de Italia, en una pequeña ciudad Piamontesa, al borde del río Sesia, había un equipo brillante que luego se hizo fantasma y misterio: la Unione Sportiva Pro Vercelli Calcio, fundada en 1892. Eran tiempos en los que no había Mundiales y el deporte se practicaba con espíritu amateur y por amor a los colores.

El equipo Leoni (Leones, su apodo) fue dominador junto a Genoa de las primeras tres décadas del calcio, que luego sería tetracampeón mundial. Obtuvo siete Scudettos entre 1908 y 1922. Milan, Inter y Juventus, los tres gigantes y también participantes entonces, quedaron detrás. Además, tuvo una racha impresionante: entre 1908 y 1913 obtuvo cinco de las seis Ligas. En 1910, Inter consiguió postergarlo al segundo puesto. Fue la Era de Oro de los blancos del Piamonte. En ese período además llegó a aportar nueve futbolistas al seleccionado italiano.

LA ULTIMA CONSAGRACION. En 1922, Los Leones eran los más campeones del calcio, junto a Genoa, con siete títulos.
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Luego, Pro Vercelli tuvo que esperar a que terminara la Primera Guerra Mundial para ganar su siguiente campeonato, que obtuvo en la temporada 1920/21. Y repitió a la campaña siguiente. El equipo era una sensación. Tanto que fue invitado a jugar en Brasil, que para esa década ya comenzaba a ganar protagonismo en Sudamérica.

Pero el crecimiento de los clubes de Milan y de Turín le quitó protagonismo. Y de a poco la gloria lo dejó de abrazar. Pero antes de apagarse para siempre, le dio al fútbol italiano a un crack de todos los tiempos, Silvio Piola. En 1930, a los 17 años debutó y jugó en el Pro Vercelli hasta 1934. Hizo 51 goles en 127 encuentros. Para entonces, ya era inevitable transferirlo: el profesionalismo había llegado. Lo contrató Lazio, bajo la presión del Régimen Fascista. Era la continuación de una carrera memorable: Piola -campeón con Italia en el Mundial de 1938, con dos goles en la final incluido- es el máximo anotador de la historia de la Serie A, con 274 goles. No es casualidad: el estadio de Pro Vercelli -con una capacidad de 8.000 personas, parecida a la de Excursionistas en sus mejores días- lleva su nombre y su apellido.

Ya sin Piola, sucedió lo previsible: en la temporada 1934/35, Pro Vercelli descendió. Y jamás regresaría. Seis años más tarde, volvería a sufrir un retroceso. Y desde entonces merodeó casi siempre entre la tercera y la quinta categorías del calcio. Lo peor, sin embargo, sucedió en 1990 cuando cayó hasta las categorías regionales. La única excepción en este largo recorrido, el único destello en la oscuridad fue un título honorífico: la Medalla de Oro al Mérito Deportivo entregada en 1967 por el Comité Olímpíco de Italia.

Ahora, con graves problemas financieros, trata de subsistir en la cuarta categoría (ahora llamada Seconda Divisione; ex C2). Está duodécimo entre 18 equipos en el Grupo A. El grande más chico del mundo compite con equipo de nombres lejanos y curiosos: el líder se llama SudTirol; también participan Ferlapisaló, Pavia, Crociati Noceto, Villacidrese, Carpenedolo, entre otros otros. Hay una impresión: aunque le ganen seguido, ninguno de ellos podrá ser nunca tan grande como el Pro Vercelli.

AHORA. El equipo está de la mitad de tabla para abajo en la cuarta categoría.
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Pro Vercelli

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