Una nueva solución de reciclaje: El Ecoladrillo Es panorama diario toparse con basura plástica en todas partes. Están en los parques, en las playas y por sobre todo, en las calles de nuestra ciudad. Es como una plaga inventada por el hombre, al ser difícil deshacerse de estos desechos. Una sola botella de PET (polietilen tereftalato) demora 15 generaciones en biodegradarse (Caleta conchemimare), y a pesar de que las bolsas plásticas nuevas que salen al mercado dicen ser biodegradables, a la tierra le toma varias décadas asimilarlas. En Chile se generan 250 millones de bolsas todos los meses y, si lo extrapolamos al resto del mundo las cifras son estratosféricas: entre 500.000 millones y un billón de bolsas de plástico por año. Lo peor es que los plásticos están en prácticamente todo lo que compramos, y, por más que disminuyamos su consumo, es en ocasiones inevitable toparnos con ellos al adquirir productos incluso de necesidad básica, como el papel higiénico o agua mineral. Se exhibe un evidente problema: qué hacer con toda esta basura tóxica que botamos diariamente. Si bien el reciclaje tradicional se presenta como una alternativa muy viable, a menudo es complicado almacenar una alta cantidad de desechos en casa pues ocupan mucho espacio. Por otro lado, ir a los centros de reciclaje involucra también un gasto adicional en tiempo y dinero, más aún si no se tienen centros cerca. Tema que tampoco aporta mucho a reducir nuestra huella de carbono. Bueno, ahora existe una solución igual de eficiente, pero mucho más fácil, práctica y eficaz de darle una nueva utilidad a los plásticos de desecho: los ecoladrillos. El ecoladrillo es una innovación de una vanguardia arquitectónica que cada día está teniendo más éxito por su bajo costo, su alto grado de sustentabilidad y su respeto por el medioambiente: la bioconstrucción. A través de la elaboración de estos ladrillos ecológicos los residuos altamente contaminantes pueden ser convertidos en casas: ecológicas, antisísmicas y termoaisladas. Son múltiples y crecientes las empresas que están adoptando estos nuevos conceptos arquitectónicos. Actualmente en Chile, la empresa que lidera estos proyectos es Grupo Sustenta. Se puede ir personalmente a dejar los ecoladrillos a sus oficinas cuando ya se tenga un número considerable de estos, pues lo mejor es que se pueden fabricar en el propio hogar. La forma de hacerlo es muy sencilla: se llena una botella plástica (que tenga tapa) con material inorgánico (plásticos, aluminios y envoltorios en general) lo más seco y limpio posible. Se compacta lo que más se pueda (con un palo por ejemplo), luego se cierra y ¡Listo!, ya se tiene un ladrillo ecológico listo para ser parte de una casa. Prueba a hacer un ecoladrillo, verás que es fácil, entretenido, y, por sobre todo, sustentable.