Fui la putita de mi marido y un desconocido (putita del litoral central)

Con mi marido disfrutamos de las salidas por las noches en la ciudad, vivimos en un pueblo pequeño a las afueras, a él le encanta verme vestida muy sexy y de vez en cuando jugamos a roles, me excita jugar que soy su puta y a el le fascina fantasear con el tema, así se fue dando lo que hicimos esa noche, fue una noche como cualquiera, quedamos en salir a la ciudad a bailar, me aliste esperando una noche excitante, me puse un faldita corta que mostrara mis piernas ligas tacos y bragas diminutas, me puse una blusa con un escote que dejara ver mis senos, pelo liso, labios rojos, me veía increíble, salimos con mi marido en el auto por la carretera, el comenzó a meter su mano por mis muslos y jugando con mis bragas, yo abrí un poco las piernas para que me tocase mejor, me excitaba verlo caliente, en un momento se me ocurrió una idea genial, le dije que parara a la orilla de la carretera, el pensó que quería orinar, ya que a veces se lo pedía por eso, pero se sorprendió cuando abrí la puerta, me senté con las piernas hacia fuera y le pedí que se bajara y viniera, el rápidamente me hizo caso , llego y se puso delante de mi, lo mire hacia arriba y le dije” quieres que sea tu putita esta noche” a lo cual es asienta con su cabeza, y le digo, bueno seré tu zorrita, pero sin quejarse, estas dispuesto, le pregunto y me contesta que si, siempre él me molesta con la idea y quería jugar con el tema esa noche, no había pensado en nada especial , solo quería mantener la excitación toda la noche. Le baje el cierre del pantalón y busque su verga, que ya a esas alturas estaba durísima, la saque y comencé a mamarla con ansias, gemía y me quejaba para excitarlo aun mas, le dije “esta mamada te costara, tendrás que pagarme, papito” jugaba con su glande en mis labios, mientras el se retorcía , los autos pasaban y las luces a veces nos alumbraban, yo excitada con el peligro a ser descubiertos, uff excitante, mis pechos estaban duros, necesitaban una lengua que los lamiera con urgencia, de pronto el me dice” date vuelta putita, quiero ponerte en cuatro sobre el asiento, a lo cual accedí rápidamente ya que estaba deseosa de su verga en mi cuca, me coloco, el levanta mi falda y corre mi braga y me comienza a introducir la verga, estaba excitadísimo, ya rápidamente comenzó a darme de estocadas, mientras me daba unas pequeñas nalgadas, ufff, me sentía una verdadera zorrita allí en la carretera, excitada, húmeda, me encantaba, él me decía” así que eres mi puta”, si le decía yo, “ te gusta puta”, siiiiiiiiiii le conteste, dame duro papi, dame duro en mi cuca, ese dialogo mas se excitaba, de pronto siento que va a acabar y le pido acabe en mis nalgas, a lo cual el accede saca su verga de mi cuca y comienza moverla y siento sus chorros de semen en mis nalgas, siento que abre mis nalgas y deja caer su semen por toda mi rajita desde arriba abajo, siento que baja desde mi culito hasta los muslos, sentía como mi culito se humedecía , mmm me sentía una zorra de verdad. Terminamos, rápidamente me limpie, nos arreglamos la ropa y proseguimos nuestro camino, en el camino mi marido siguió el juego de la puta y yo seguí el juego, para hacer la noche mas excitante, como dije no había pensado en nada especial. Cuando llegamos al local donde íbamos a bailar, entramos y estaba con bastante gente, la música es de mi gusto en ese local, nos fuimos a bailar con mi marido , y seguimos con el juego, mientras bailábamos él me mordía el cuello y la nuca, ufff, me tenia excitada, de vez en cuando me manoseaba disimuladamente y me tenia toda húmeda, mi cuca estaba húmeda y deseosa, yo le decía “ va a querer nuevamente mis servicios señor” y el sonreía sin contestarme, derepente me dieron ganas de ir al baño y le deje a él que me esperara allí bailando, ya en el baño hice lo mío y se me ocurrió algo genial para seguir con la excitación de la noche , me saque las bragas y me las guarde, al salir del baño me sentía muy zorra caminando sin bragas, uff era una sensación excitante, veo a mi marido moviéndose entre la gente, cuando llego a su lado me toma de la mano y me besa con pasión, lo siento excitado mas de la cuenta, veo que el juego le esta provocando mucho a si que decido entregarle las bragas , mientras le digo” señor mi cuca esta deseosa de cumplir sus fantasías”, la verdad fue lo primero que se me ocurrió , pero al ver su cara transformarse me excite aun mas, tomo mis bragas las olio y se las hecho al bolsillo, después me tomo de la cintura con una mano y la otra toco mi culo por sobre mi falda, como comprobando que realmente andaba sin bragas y al parecer lo pudo confirmar, así bailamos mucho rato, entre juegos de palabras, y toqueteos y movimientos, sin darme cuenta lo comencé a llamar “señor” en todo momento, así estábamos hasta que paramos un rato a descansar, fuimos a la barra a pedir un par de tragos allí estábamos cuando se acerca un tipo a pedirme fuego, le doy fuego y el se queda buscandome platica, este tipo no había visto a mi marido, ya que mi marido estaba pidiendo los tragos y pagando, el tipo me comienza preguntar mi nombre y de donde era, cosas típicas en estos casos, me dice que anda solo esa noche y que le gustaría conversar y conocerme en buena onda, en eso estábamos cuando me pregunta si andaba sola, estaba a punto de contestar que estaba con mi marido, cuando llega mi marido por atrás y le dice antes que yo “ no, anda conmigo compadre” en tono entre serio y broma, el tipo se descoloco un poco y solo atino a disculparse y retirarse, pero mi marido le dice, “no viejo no te vallas quédate, comparte con nosotros un trago, ven, tranquilo viejo, así que nos sentamos en una mesa los tres a tomarnos los tragos, el tipo era alto y fornido, tenia hombros anchos y bien parecido, comenzó a platicarnos del lugar y de que era entretenido, yo no sabia que hacer no entendía mucho lo que pasaba, pero entendía que mi marido estaba jugando el juego que habías empezado, así que decidí seguir jugando, así estuvimos los tres en aquel lugar bailando, bailaba con los dos y con uno a la vez, entre juegos y tragos nos bromeábamos, Alex, así se llamaba el tipo, era muy simpático, e hicimos amistad, me gustaba bailar con los dos al mismo tiempo y provocarlos con mi cola, era lo que mas le gustaba a mi marido, cuando rozaba mi cola y pasaba mis glúteos por sus entrepiernas, él no se daba cuenta que entre el juego y juego yo lo hacia por que comencé a sentir la verga de Alex dura bajo su pantalón, la sentía entre mis nalgas y eso me provocaba un cosquilleo muy rico y Alex, cada vez con mas confianza, me apretaba contra el cada vez más, mi marido no se percataba, pero ese juego me encantaba, total yo pensaba que esa excitación mantenía la noche así caliente, así estábamos cuando nos damos cuenta que ya el local lo van a cerrar y la gente comienza a irse del lugar de apoco, y antes que cortaran la música, mientras bailamos, mi marido nos dice a los dos “ chicos por que no nos vamos a tomar unos tragos a otro lugar para que no muera la noche” a lo cual nos miramos y al mismo tiempo dijimos si vamos, yo no tenia idea que tenia pensado mi marido. Nos fuimos los tres en el auto yo con mi marido sentado adelante y Alex atrás, pasamos a una tienda a comprar una botella, hielo, vasos y cigarrillos, yo sin saber donde íbamos, mi marido tomo rumbo por la carretera, ya los tres a esas alturas muy animados en el auto conversando y riendo, yo pensaba que mi marido se dirigía a un mirador de la ciudad o algún lugar cerca de alguna comunidad, sin embargo en medio de la carretera se salio por un camino lateral en medio de la nada, llego hasta a un bosque en un mirador que daba a la bahía de la ciudad donde habíamos ido, era un lugar hermoso, pero alejado de todo, estábamos solos allí, estaciono y abrió las puertas del lado contrario al conductor, ya que ese lado daba para el bosque y estaba mas tapado para nosotros, sube el volumen de la radio y saca la botella, los vasos y el hielo para servirnos un trago, la música estaba buena , y comencé a bailar sola al lado del auto, mi marido se me acerca y me empieza a tocar y tomar por la cintura mientras a mi oído me decía “ como estas putita, me tienes caliente”, yo nerviosa lo aparte mostrándole que no estábamos solos, mi marido se dio cuenta y le dijo a Alex, disculpa Alex, pero la verdad en confianza me tiene caliente y no puedo evitarlo, Alex nos dijo que no nos preocupáramos , toda la confianza chicos somos adultos, a lo cual mi marido me toma con fuerza contra el auto y sin poder resistirme me da un beso, mientras me manosea por debajo de la falda, le acepte al final el beso, que mas aumento mi excitación, sus manos tocaron mi cuca que estaba húmeda nuevamente, después de un momento lo aparte y le dije “ ya para que me pasan cosas y esta Alex , el pobre mirándonos”, mi marido sonríe y da un brindis por la noche excitante, Alex toma su trago y se acerca y me invita a bailar allí al lado del auto, mi marido sube el volumen de la radio y estaban tocando una de esas canciones fogosas caribeñas y Alex se mueve muy provocativamente detrás mío, yo continuo con el juego de rozar mi culito en su entrepierna como lo hacia en el local, mi marido ya a esas altura se dio cuenta que me gustaba y por que me gustaba, al ver la cara que ponía mi marido, me acerque a Alex, y más sentía su muslo entre mis piernas, comencé a sentir mi piel excitada , sin pensarlo me empecé a frotar en Alex, bailando y moviéndonos, sentía a Alex encima, tocándome y pasando su rostro por mi cuello, su brazo me sostenía fuerte e impedía que me alejara de él, ya a esas alturas no me importaba, ya que aquel tipo me estaba haciendo sentir muy rico, en se transe estaba, cuando mi marido le dice a Alex, al ver que Alex se cohibía de vez en cuando, Con confianza Alex, si a esta putita le encanta que la tomen así, allí entendí las intenciones de mi marido, mire a Alex y vi en sus ojos la lujuria, solo atine a sonreír y Alex me robo un beso, mire a mi marido y él me sonrío, entonces entendí que tenia permiso para hacer lo que quisiera, así que tome a Alex y lo bese muyyy rico, sus labios succionaron los míos , besaba exquisito, su lengua jugaba con la mía y la movía como si estuviera comiéndose mi sexo, mmm, que ricura mas rica, sus manos ya las tenia en mis nalgas y apretándome contra el, sentí su verga dura ya casi explotando en sus pantalones. Me aparte de él con la escusa de tomar un trago, ya que la situación me tenia nerviosa, así que fui y me tome un trago, mi marido con Alex comenzaron a platicar entre ellos, cuando me acerque ello callaron y les pregunte de que hablaban, mi marido me dijo, “ lo que pasa es que le comentaba a Alex que me tienes muy caliente y te quiero folla, ya le conté que lo hicimos en la carretera cuando veníamos, y el me confeso que igual tu lo tienes caliente y que también te quiere follar, así que le propuse a él que podríamos compartirte ¿ que opinas mi vida?”, me quede helada por unos segundos, pero al ver sus rostros entendí que estaban deseosos de follarme, me puse nerviosa , pero al cabo de unos segundos entendió que tenia a dos hombre para mi sola, que podría tener dos vergas para follar al mismo tiempo, bueno entonces que hacemos, les dije, y mi marido me dice, fácil serás nuestra putita, que atiende a sus clientes, ufff eso me subió la calentura abruptamente, entonces sin pensarlo mucho, me acerque al auto y me siento en el asiento de atrás con las piernas hacia fuera y acerco a mi marido, todo esto ante la atenta mirada de Alex, bajo su cierre y busco su verga, que a esas alturas ya estaba dura, y comienzo a mamarsela, la tenia hinchada, dura y caliente, allí estaba yo mamando frente a un desconocido, que me tenia caliente, en un momento miro a mi marido y él me hace un gesto para que invitara a Alex, lo llame y Alex se acerco, con la otra mano baje su cierre y deslice mi mano lentamente dentro de su pantalón, y encontré su verga durita, era enorme rica, carnosa, uff, solté a mi marido y me puse la verga de Alex entre mis labios, vi su cara la expresión del placer, me comí cada centímetros de esa rica verga, mientras con la otra mano masturbaba a mi marido, me turnaba con uno y con otro, mientras me decían lo rico que lo hacia, me sentía una puta de verdad follando en la carretera, mi cuca estaba que explotaba, deseosa de verga, de pronto me toman los dos y me paran, y al mismo tiempo me dan vuelta y me ponen boca abajo sobre el capo del auto, sin hablar solo gemían , ya estaban lujuriosos y deseando follarme, siento que ambos levantan mi falda, abren mis nalgas y comienzan a comerse mi cuca, uno abría y el otro me lamia entera ummmmm rico, ellos me decían, ¿te gusta putita?, ¿ te gusta?, siiiiiiiiiiii, no paren, les respondía, así se turnaban, sentía como dos machos me estaban comiendo mi sexo, sus lenguas buscaban mis labios íntimos y estimulaban mi clítoris, yo abría mis piernas para dejarlos entrar cada vez más, en eso estaban, cuando siento que paran y me toman de la cintura y comienza a penetrarme, primero Alex, me metió su verga despacio, para que no me doliera, pero yo quería que la metiera entera pronto, sus movimiento comenzaron despacio, entendí que estaba tan caliente que no quería acabar de inmediato, así que lo deje, después ya no aguante mas y comencé a moverme lo mas que podía estando así agachada apoyada en el capo, sentía su verga dura como entraba en mi vulva , mis labios íntimos recorrían cada centímetros de esa verga venosa y caliente, su pelvis chocaba con mis nalgas, a cada envestida, me regalaban un rico placer, placer de ser follada como una putita en la carretera por él, me afirmaba como podía, ya que me resbalaba, de pronto, mi marido le dice a Alex” me toca a mi viejo, déjame follarme a esta putita”, sentí como Alex se desprendía de mi, sacándome su verga de mi interior, me sentí muy indefensa exponiendo mi sexo ante dos machos que solo me follaban. Mi marido me tomo, por la cintura y comenzó a penetrar, Alex solo miraba, se sirvió un trago mientras me follaba mi marido, mmm, yo miraba a Alex con cara de zorrita, pidiéndole sexo con la mirada, el mas se excitaba, veía como se masturbaba para no perder la erección, su miembro brillaba con mis fluidos a la luz de la luna, mi marido, me estaba dando duro, me dabas unas nalgadas que me encantaban, de pronto Alex toma la iniciativa y le dice a mi marido, “ déjame a mi, quiero darle a esta putita lo que quiere”, mi marido salio de mi y mire hacia atrás y vi como Alex se acomodaba en mi abertura, y comenzaba a deslizar lentamente su miembro en mi sexo, mmm sentía cada centímetro entrar lentamente, sus venas y su temperatura, era exquisito tenerlo en mi, comenzó a bombear fuerte , mientras me afirmaba en el capo del auto, ya no daba mas, Alex deslizó su mano hasta mi clítoris y comenzó a masturbarme mientras me daba unas buenas envestidas, ya no aguantaba con su estimulación, mi marido interrumpe diciéndole “ has que esta zorrita acabe, que se lo tiene merecido”, dicho eso, Alex me suelta el clítoris y me toma de la cintura y comienza a moverse con un ritmo mas lento pero penetrándome mas, toma mis caderas y siento sus manos sujetadas fuertemente, yo tomo mi clítoris y comienzo a estimularlo, mis gemidos se escuchaban ya a esas alturas en todo el bosque, pero solo la noche era mudo testigo de la follada que me estaban dando en ese lugar apartado, de pronto mi cuerpo comienza a dar temblores y es señal que ya el orgasmo se viene, el placer se incrementa y suelto un grito mientas Alex profundiza la envestida en mi, le grito no pares, no pares, dale fállame y el orgasmo se apodera de mi cuerpo, me apretó contra Alex y con una mano que deslizo hacia atrás trato de tomar sus nalgas para apretarlo contra mi, así una y otra envestida provoca que se me corte el aliento, Alex gemía y me daba de nalgadas, mientra me decía” eso es lo que querías mmm”, yo gimiendo y contorneándome ante su sexo duro penetrando mis nalgas, era un tipo muy rudo, no me dio un solo respiro, eso me fascina, eso me provoca, y me daban ganas de fallármelo toda la noche. Así termine rendida sobre el capo, mientras Alex seguía moviéndose, de pronto Alex me dice que acabaría, y mi marido le dice que deje mis nalgas con su leche, así Alex se sale de mi abre mis glúteos y deja caer los chorros de leche en mi rajita, siento esa leche caliente caer y deslizarse, como cuando lo hicimos con mi marido, pero esta vez no terminaba nunca de dejar Alex su marca sobre mi, después de su ultimo chorro limpio con movimientos su miembro en mis nalgas, de un lado al otro, después me dio una nalgada suave, y me dijo”, ya zorrita, te deje llena de mi leche”, mmm me sentía una verdadera putita, con mi cola parada, yo sobre el capo, con mis nalgas llenas de la leche de Alex, ufff, luego mi marido se acerca, me toma me pone en culillas y me dice” ahora zorrita te toca mamar esta verga”, lo empiezo a masturbar, mientras observo a Alex, , sentado en un tronco, me miraba aun con lujuria, creo que no será la ultima vez que seré la putita de ambos, mi marido me toma y me acerca a su verga, yo comienzo a mamar y me dice, “ cuanto nos vas a cobrar por tus servicios” lo cual me excita mas, y me doy cuenta que el juego es hasta el final, así que le digo, te voy a cobrar en casa, así que hice acabar a mi marido , mientras Alex nos observaba, después nos arreglamos la ropa y nos fuimos en el auto, me senté atrás con Alex y nos fuimos todo el camino besándonos y tocándonos, para que mi marido nos observara, lo dejamos en el centro, quedamos en juntarnos en otra oportunidad y salir los tres, así que pronto tendrán otra historia , de la putita de mi marido y nuestro amigo.

 

Gracias, estas son historias reales, experiencias de juegos sexuales, con mi mujer, se vienen otras historias.

 

Gracias, pronto subiremos mas travesuras, historias reales.