Historia de un perdedor PRIMERA PARTE.

Eran las 8 de la mañana, tome café, prendí un cigarrillo, me disponía a escribir mis primeras líneas. Sí, tenía intenciones de empezar una novela, por que pensándolo bien era hora, había salido hace poco de la carrera tenía que hacer algo, siempre quise hacerlo a los 21 pero me quedaba solo con la idea. Decidí que debía comenzar.
Mi vida era un fiasco, vivía en una habitación pequeña, una incomoda cama y una tele en blanco y negro. Bueno la tele pensé en venderla por que no veía nada. Solo me dedicaba a hacer poemas y venderlos a los transeúntes. Eso lo hacia los fin de semana, mientras que de lunes a viernes trabajaba de mesero en un Pub.
Muchos de mis amigos ya habían publicado y tenían la fama que yo siempre había soñado, por lo menos aun no pierdo la esperanzas. En algún momento alguien se puede interesar en lo que hago. En la universidad fui un buen alumno, pero no sirvió de nada, dedicarse a esta carrera, para muchos puede parecer solo por amor al arte. Mis padres enfadados conmigo querían que estudiara leyes u otra cosa, pero yo sabía que esto era lo mío. A veces pienso que tenían razón cuando estoy demasiado desanimado.
Prendo otro cigarro. A veces me dan ganas de beber y nada más que eso, pero después recuerdo que tengo talento, algo tengo. Solo falta que alguien lo vea o hacer una buena novela. Comienzo a escribir en mi cuaderno. Por que comprenderán que un computador no puedo tener, no me alcanza la plata para eso. Aunque quisiera. Mi trabajo en el Pub no me da todos los lujos que siempre soñé tener.
Soy un hombre solitario quien querría fijarse en un estropajo como yo, además prefiero que sea así, sería una pérdida de tiempo estar conmigo o tal vez para mí lo sería, debo enfocarme en esta novela. Escribo. Pienso.
A las 6 entro al Pub ¡OH, que emoción! Se supone que un trabajo bohemio como aquel me debería hacer feliz, pero no es así, me gusta la faceta del hombre solitario, todos los días lo mismo, tardes intentando escribir la maldita novela y lamentándome de mi puta vida, después el Pub, beber, fumar y dormir. Así toda la semana y lo findes salir a vender mis poemas y esperar que la gente sea un buen samaritano y se compadezca de este pobre escritor mediocre. Que trabaja para pagar un crédito de mierda, de una carrera que lo único que me hizo es ser nada. Sí, me disgusta, me disgusta, pero que puedo hacer. Nunca he tenido buena suerte, de niño, ni con mujeres, ni con concursos ni con nada.
Soy un pobre y triste weon, que patética mi vida. Me voy, ya es tarde. Tengo que trabajar. Otro día más. Bienvenido a mi realidad. Un ser patético. Algunos optimistas me dirían agradece que estas vivo. Me carga la gente optimista ¡Púdranse!
Cierro la puerta bien, no vaya a ser que me roben el único material que tengo, la tele, que quiero sacarle algunos pesitos aunque sea. Por último por caridad, ahí viene la vieja loca, me dirá que cuando le pago. ¡Ufff... anda chúcara! Pero no me esta retando a mi, sino a su marido. Pobre huevón. Igual no hace nada, yo si fuera mina suena gay pero no importa lo mandaría a la chucha. MHH vida de mierda que tengo.
Menos mal que el Pub queda al lado, por que o sino no iría no más pos. Doy una vuelta y ya esta. Tengo que servirle a estos huevones, más encima.
Día raro, hay un tipo mirándome ¿Pensara qué soy gay? Sí se me acerca con intenciones medias raras le saco la chucha no más, ni ahí con que me echen.
-¡Hola!
-¿Qué necesita, señor?
-Sabes te parecerá algo extraño lo que te diré, pero hoy es tu día de suerte.
-¿Sí?
-Bueno un amigo tuyo me dio muy buenas referencias de ti, me contó maravillas, yo le había ofrecido el trabajo a él, pero me dijo que él no se dedicaba a eso y no tenía intenciones además.
-¿Qué cosa? Sea más breve, estoy trabajando, no quiero que me echen. Sonreí.
-Bueno yo trabajo en el canal 15 ¿Lo conoce?
-Bueno, no veo mucha tele que digamos, pero, si algo he escuchado.
-Es un canal muy importante a nivel nacional, necesitamos un guionista. Para el área dramática, tu amigo me dijo muchas cosas buenas de ti, entonces creo que eres el indicado, podrías mostrarme algo de lo que haces.
-¿Quién le dijo eso? ¿Qué amigo?
-El gran escritor Adán Bergen.
-Que buena, no pensé que se acordara de mí, que extraño, que estúpido ¿Por qué no acepto el trabajo él mejor?
-Por que no quería, dijo que no quería desperfilarse.
-Bueno a mí tampoco me gusta mucho, siempre hacía guiones, pero por ocio nada más.
-¿Tienes algo para mostrarme?
-Sí, es su día de suerte, claro que tengo, espere iré a buscar, mi jefe me esta mirando feo igual.
-No tendrás que trabajar más acá, si Adán Bergen dice que eres el mejor para esto, le creemos.
-MH ya veo, vuelvo enseguida.
No lo podía creer esto me estaba pasando a mi, fui a buscar uno de mis poemas, por que esta era la oportunidad de mi vida, como odiaba a ese huevón de Adán, pero igual gracias, que estúpido. Fui corriendo saque unos papeles y volví ante él.
-Tome, lea no más, no le cobraré por leer mis poemas. Reí.
-Esta bien, me parece.
Comenzó a leerlos y hubieron muchos MH, pensé: otra vez cague, puta que soy malo para esta hueva, pensar que creía que tenía talento.
-¡Oye!
-¿Sí, dígame?
-Adán tenía razón, nunca se equivoca, acá hay mucho talento, bueno estas contratado, tienes un periodo de 2 semanas para traerme la idea principal de la telenovela y de verdad renuncia a este trabajo, necesitas enfocarte en el guión nada más.
-Sí, lo haré ahora.
-Bueno, Kafan un gusto haberte conocido y en 2 semanas más nos vemos.
-Adiós, señor, gracias, gracias.
No lo podía creer, esto me estaba pasando a mi, al fin alguien me había apreciado, ya no sería un “Don nadie” nunca más, no tendría que servirle a nadie más.
-Mesero, mesero ¿Cuánto rato más tengo que esperar que me atiendas, ah?
-Atiéndete sola, maraca. Reí.
Acá viene este huevón de mierda, de seguro que me retara, pero importa una hueva.
-Esa no es manera de tratar a los clientes ¿Qué te pasa Kafan?
-Nada, no sigo, tengo un proyecto, chao ¡Púdrete huevón, siempre me caíste como las pelotas, te creí la raja, por que eres jefe de este antro de mierda! Espera no más, seré grande y ya nadie me mandara. Chao no más.
Mi vida comenzaba, hoy comenzaba, siempre quise decirle todo esto a este huevón. Ahora mi vida cambiaría.

 

jajaja es una historia