Una investigación interna inició la empresa TurBus en contra de uno de sus conductores por un hecho ocurrido en el terminal de Viña del Mar, en el cual una mujer iba a ser dejada abajo de un viaje con dirección a Santiago pese a tener pasaje, situación que incluso derivó en que el conductor echara a andar el bus con la pasajera apoyada en la parte delantera del vehículo. El hecho ocurrió el pasado martes en dicho terminal, cuando la mujer -que compró el pasaje cerca de dos horas antes- habría llegado momentos después del cierre de las puertas del transporte de pasajeros, por lo que comenzó a golpear la puerta, gritar y finalmente interponerse a la salida del bus. En un comunicado, la empresa señaló que el actuar del chofer fue “incorrecto”,aunque advirtió que es protocolo de la compañía que los pasajeros se encuentren en al andén entre 20 y 30 minutos antes que el bus comience su recorrido. Humberto Toledo, subgerente de TurBus, se refirió a los errores cometidos tanto por la pasajera como por el conductor. Al momento de ocurrido el hecho, testigos del mismo llamaron a carabineros que estaban cerca del lugar, lo que ayudó a acelerar el proceso, en que finalmente la empresa acordó con la pasajera reembolsar el valor del pasaje para que pudiera subir a otro bus minutos después.
