Mi primer trio.

Soy un hombre de 29 años actualmente, creo que a lo largo de mi vida la única constante ha sido que soy capaz de cualquier cosa por buen sexo, jamás había logrado ser fiel, ya que siempre aparecía otra mujer con una propuesta más interesante y como siempre he sabido separar lo físico de lo sentimental, terminaba cayendo en la tentación y lo lograba sin sentirme culpable.

Hace un par de años conocí a mi actual pareja, llamémosla Osa (Oso soy yo). Esa tarde conjugo todo para que al final de la noche yo tuviese en mi cabeza la idea fija de que debía ser MIA.
Después de una par de semanas, salidas, conversaciones, etc… Terminamos comenzando algo que en un principio se catalogó como “Nada serio” pero como sabemos los rumbos de la vida, termino en algo muy serio…

Ella me dejo en claro que su visión de la vida era muy parecida a la mía, encontrándome parado en la vida frente a una hermosura de 1.75 mt, delgada, pelo corto y una cara que dependiendo de cómo le diera la luz te hacía pensar que estas en presencia de un ángel o una pervertida, lo cual me volvía muchísimo más loco.

Su cara la delataba, yo creyéndome un pionero en las libertades de lo carnal, me di cuenta que era solo un niño en pañales, ya que con ella fui descubriendo nuevas cosas, muy entretenidas por lo demás, dándome cuenta que debía aprender para no desentonar con este monumento de mujer.

Yo tome el rol de estudiante, y ella la maestra, haciéndome llegar a conocer placeres indescriptibles, dándome total confianza y libertad suficiente como para saber que lo que deseáramos probar era por lo bajo conversable.

Un día de verano nos tocó asistir a un evento social con código de vestimenta. En lo personal siempre he tenido un fetiche por estas ocasiones, ya que las mujeres saben explotar su sensualidad a un nivel estratosférico, ella esa noche lo logró, cuando llegamos me di cuenta que la miraban tanto hombres como mujeres, eso me calentó y tengo aun la impresión que a ella también.

Al otro día me comento que la pareja de un amigo en un momento de descuido le toco su vestido por la parte baja y al ser este bastante corto pensó que su mano se dirigía a otra parte, haciendo que por su cabeza pasaran mil ideas en un segundo. Cosas de la vida a esta señorita la conozco desde muchos años atrás, incluso siendo la ex novia de un amigo.

Este hecho marco un antes y un después, siendo ese acercamiento el primer paso de este relato.

Tiempo después y nuevamente apelando a la total confianza que tenemos, me cuenta acerca de su pensamiento con respecto a su sexualidad y que en esos momentos se estaba considerando bisexual, en mi cabeza paso primero una desconfianza de saber que con lo bella que es y sabiendo lo que genera en los hombres ahora además debía tener cuidado con lo que generaba en las mujeres, este pensamiento se desvaneció apenas recordé lo mucho que confío en ella. Y como se imaginarán seguido de este pensamiento de inseguridad, la maquinita pervertida de mi cerebro comenzó a funcionar y las conversaciones que habíamos tenido acerca de hacer un trio con otra mujer y su aceptación a este tema empezaron a tomar una forma mucho más sólida y real.

Por supuesto que pasaron los días y este fue un tema que se conversó mucho más seriamente y comenzamos a pensar en candidatas, principalmente una par de amigas mías que compartían estos gustos. Nunca logramos concretar nada con ninguna, pasaron los meses y mientras estábamos de viaje veíamos fotos en una aplicación de mi teléfono y aparece una foto de esta amiga que mencione previamente (la llamaremos Miel) muy sexy en un traje de baño y mi pareja me hace el comentario que ella tenía muy bonitas piernas. Debo hacer una pausa para comentar que ella es el tipo de mujer que te puede conquistar desde el momento que te guiña un ojo, ya que ella completo es un conjunto de seducción, delgada, voluptuosa y una carita angelical que contrasta diametralmente con su forma de vestir, siempre con prendas apretadas, cortas o escotadas.

Por algún motivo mi “pervertiometro” me indicio que existía algún potencial en este comentario, por lo cual me decidí a hablarle, conversamos esa noche y le insinué que Osa la había encontrado muy atractiva, casi como una premonición ella encontró la confianza y me comento que ella también la encontraba muy guapa, la conversación subió de tono y Miel nos regaló un par de fotos y como agravante a todo esto, nos confesó que se iba a masturbar después de lo conversado. Esa noche me costó conciliar el sueño.

Tiempo después ellas se juntaron a tomar algo para conocerse y entrar en confianza, yo las fui a buscar después y lleve a Miel a su casa, de toda la conversación que tuve con mi pareja con respecto a ellas dos, solo recuerdo el comentario “esa noche debo haber estado muy ebria, no recordaba que era tan linda” Eso hizo volar mis pensamientos.

Tiempo después se arregló la segunda salida, la pasamos a buscar compramos algo para tomar, algo para comer y fuimos a mi casa. Ya teniendo la práctica en conversaciones no verbales con Osa, vi en su cara que debía retirarme, por lo que aproveche de salir a trabajar un par de vueltas (era conductor de Uber). A eso de las 2 Am volví. Ellas estaban en mi cama acostadas y conversando. Nos tomamos unos tragos y conversamos muchísimo, lo cual creo mucha confianza en los 3. Hasta que llega el momento en el que una de ellas dice, deberíamos dormir se apagaron las luces y quedo Osa al medio entre Miel y yo.

Yo sabía lo que quería y por Dios que lo quería así que hice mi jugada, esperé un rato y comencé a acariciar el brazo de mi pareja intentando guiarlo a los pechos de miel pero como no sincronizamos bien en ese momento termino solo mi mano en uno de ellos, no hubo reproche de ninguna de las dos.

Mientras la acariciaba besaba el cuello de mi pareja y sentía como su respiración se agitaba, hasta el punto que perdí la noción de que manos tocaban a quien, me excitaba de sobremanera escuchar esos exquisitos besos entre ella mientras tocaba todo lo que mis manos permitían, es estos momento yo ya estaba que reventaba, escuchaba y sentía como la lengua de miel comenzaba a devorarse los pezones perforados de osa y yo la masturbaba al mismo tiempo, Osa hacia lo mismo conmigo. En ese punto ya no recuerdo como fue el orden de las cosas, pero como punto importante solicite prender la luz ya que estaba sucediendo un espectáculo que no quería ni podía perderme, cuando prendí la luz Osa se comía con muchas ganas la vagina de Miel y yo me acerque a lamer sus pechos para complementar el placer que recibía ella, en ese momento miel no duda y se lleva mi pene a su boca, como sabe usar su boca esa mujer, lo hacía con tantas ganas que mi pareja me reprochó que yo la estaba forzando demasiado, a lo que Miel y yo nos miramos y compartimos una risa de complicidad, acto seguido Miel se disculpa y dice que lo hará más suave. Nos Reímos

Cambiamos de posiciones y quedo expuesta ante mí la cola de Miel, que mostraba una hermosa, jugosa y apetecible vulva adornada por una corona más oscura un poco más arriba. Me comí todo lo que pude y con muchísimas ganas.

Cuando empecé a sentir como mi orgasmo se avecinaba les solicite un regalito especial y me lo concedieron, por lo cual ambas me hacían un sexo oral delicioso se turnaban mi pene y mis testículos, recibí un placer maravilloso al ver y sentir estas dos hermosuras comiéndome, al final me derrame en sus caras mientras ellas se besaban. Me sentí eternamente agradecido por saber que estaba viviendo mi propia película porno.

Esa noche no hubo penetración, solo sexo oral y ayuda manual, pero fue completamente excitante. Más aun entendiendo que esto se volvería a repetir.

 

Si el trabajo me da el espacio les prometo que escribire la parte 2... esto se repitio, hoy por distintos rumbos de la vida no lo hemos vuelto a repetir... pero se que existe interes de los 3...