Lo sensual de un embarazo

Ella estaba embarazada cuando la conocí.

Unos ojos color miel que iluminaban el suelo cuando pasaba, siempre tan seria que no imaginarias la amazona que escondía bajo su ropa. La apoderada responsable del colegio, la compañera de trabajo a la que nadie molesta, la compañera de curso que siempre tenía buenas notas, era perfecta tanto profesional como personalmente y cruzar esa línea se veía como algo imposible, pero vaya destino loco que al quedar embarazada bajo la guardia y comenzó a interactuar más con el resto de los compañeros.

Según me cuentan ya que desde el día uno la encontré un amor, nos íbamos juntos en el metro, me preocupaba que le dieran el asiento y ella de agradecimiento llevaba mi bolso entre sus piernas, cada día el traje de dos piezas le quedaba más apretado y le molestaba más, hasta que un día llegó con un pantalón elasticado y una blusa con polera de pabilo debajo, era primera vez que le veia el escote, y no se si por el embarazo o siempre fue así, pero me dejó embobado, y con la confianza del día a día se lo dije por el chat interno.

Siempre tuviste ese escote y solo yo no lo había notado?
Nuestros escritorios estaban en paralelo así que me miró por sobre la pantalla roja como un tomate y me abrió los ojos muy grandes, le devolví un ? y recibí la respuesta más rica que nunca esperé:
Siempre he tenido pechugas grandes, pero me daba vergüenza que me vieran así en el trabajo, en serio no lo habías notado nunca?
Y para serles franco no, el embarazo le bajó la guardia a ella, pero también a mí, no la veía como una mujer a la cual se podía cortejar hasta ese día que comenzaron las frases con doble sentido y ver hasta donde llegaría uno y el otro. Le dije que me diera el WhatsApp para saber cómo se sentía en las noches (siempre hay una excusa), ella acepto y seguíamos hablando terminado el horario laboral, no sé si su pareja no le importaba o no estaba muy preocupado por ella pero siempre estaba conectada, hablábamos mucho más en la noche que durante el día en el trabajo y así fue como la confianza fue cada ves más.

De a poco me comenzó a mandar ropita de la bebé que compraba, como cosas para la pieza de la nena y junto al verano comenzó a salir el tema del embarazo, el calor, y el tipo de pijama que podía usar. Me decía que tenía un pijama de verano que era un shorts y una polera pero que no había pensado en las noches de verano así que tendría que buscar alguna alternativa.
Yo comencé a darle alternativas juguetonas a ver si picaba, baby doll, camisas cortitas, sacando fotos de Google a ver cuál era el límite, le mandé uno negro con tirantes muy escotado y que tenía un sobretodo de encaje que no tapaba nada y ese le gustó, le dije que si de verdad le gustaba yo se lo podía regalar, pero me tenía que mandar una foto mostrándome como se le veía, me mandó un emoticón de sonrojarse, pero en ningún momento dijo que no.
Nos despedimos y quedó ahí el tema, paso el fin de semana y el lunes cuando fuimos a almorzar me dijo que si, que lo quería, yo lo había olvidado y le digo, que cosa? El pijama, que si lo quiero. Entonces quedamos que a la salida lo iríamos a comprar, como seguían las tiendas en "pandemia" no se lo podía probar, así que en casa me avisaría que tal.
Ese día llegué a mi casa y cancele todos los panoramas jajaja mi único panorama era esperar que llegara esa foto. Y cuando la mando me dejó vuelto loco. Era otra mujer, de partida se había bañado, dejado el pelo suelto y húmedo (nunca le había visto el pelo suelto) que le caía por los hombros hacia sus pechos, el escote muy pronunciado y se adivinaban unos pezones muy gordos y el borde de la aureola se notaba en la tela. Mirando a la cámara y el cubretodo en los hombros.
Manda la foto y me dice así está bien?
No sabía si dar el siguiente paso o bajarme ahí, como si de poker se tratara, tenía una buena mano en la mesa, pero si doblaba la apuesta podía tener el premio mayor o perder todo lo avanzado. Me la jugué, o se rompe o se raja me dije a mi mismo y le respondí un, se ve lindo, pero no alcanzo a ver tu guatita, te cubre bien?
y recibí una segunda foto entre juguetona y tierna. El escote era el mismo, pero estaba la camisa subida hasta el inicio de los pechos dejando ver su embarazo y una pantaleta negra muy normal, pero algo prendió en mi, no se si fue ella, su embarazo, la forma de su ombligo, el tono de piel pero me prendí, y se lo dije:
No sé que fue, pero tu foto me tiene muy excitado, me mandó un jaja y pregunto: en serio?
Y ahí me baje esperando llevarme el premio mayor, quieres ver?
Ella puso dos emoticones sonrojados y la palabra mágica: ya
No busque ni ángulo, solo desabroche mi pantalón, baje el boxer y frente al espejo del baño dispare, solo me preocupe que no se me viera la cara, de pie y con el pene apuntando al techo, todo o nada me dije. ENVIAR

Dos sheck celestes, y no hablaba, no sabía si le había gustado, si no le había gustado, si estaba enojada o que, ese chat no hablaba, entre la ansiedad y los nervios se me bajo, lo guarde y salí a ver tele, mañana sabré que onda, cuando me llega un mensaje, era una foto de bombita.
La abrí y era ella misma, sin la pantaleta negra, de piernas abiertas, tapando lo que quería ver y los pechos totalmente fuera. La vi, termino la bombita y me dijo: nunca pensé que me iba a terminar masturbando mirándote.
Había ganado premio, pero quise más, y no te gustaría que te tocara yo mejor?
Me mandó un mmmm, un jajaj y un llegó mi marido.
Al otro día no se habló de eso en el almuerzo, compartimos con otros compañeros y al volver de comer le consulte vía chat: estás enojada?
No, xq? Cómo no me hablaste más del tema.
Me dijo que la acompañara a la cafetería:
Mi marido tiene que salir por trabajo y yo le dije que prefería quedarme, te aviso cuando, solo mantén el celular cargado.
Don ansiedades no durmió bien los próximos 4 días, y lo que pasó se los contaré en la segunda parte