Mi mujer a solas con un haitiano dotado

Hola de nuevo,

Ya que el tema anterior sobre nuestro primer trío tuvo buena recepción, les contaré sobre lo que pasó después.

Bueno, como dije, mi mujer, Valeria (28) siempre fantaseó con tener sexo con un hombre de color. Luego del trío que tuvimos con nuestro amigo haitiano, ella quedó fascinada. Aquel día salió adolorida del motel de tanto que se la cogió Juan (como le diremos a este negro dotado).

Nuestra relación siguió tal cual, no cambio en nada. Incluso el sexo mejoró. Mi deseo por ella aumentó y no sé si fue porque se sintió realizada con lo que hizo (y le hicieron) que sentí que su calentura creció bastante.

Luego del trío Juan me habló para preguntarme cómo lo habíamos pasado. Como dije, él solo hablaba conmigo y no con ella, por lo que les propuse hacer un grupo en Whatsapp los tres y poder conversar por ahí. La idea era generar la mayor buena onda posible y así poder repetir nuevamente en un trío o ellos a solas, que era una de mis fantasías.

Él, que me confesó que había disfrutado mucho acostándose con mi mujer, aceptó. Ella también. Conversamos algunos días los tres, pero Juan era muy respetuoso. Valeria se le insinuaba e incluso enviaba fotos desnuda, pero él reaccionaba con cierta timidez, lejos del semental que habíamos conocido. Le escribí y le dije que si gustaba podían hablar por interno, no necesariamente por el grupo. Me preguntó si no me molestaba y si le daba permiso. Obviamente accedí.

Hablando a solas todo fluyó más rápido. Juan correspondió a los coqueteos de Valeria y comenzaron a intercambiar nudes. Ella me mostraba todo: las conversaciones y las fotos y videos que se enviaban. Él, por su parte, también me contaba lo que hablaban. Todos sabíamos que esto solo era sexo y cada uno entendía muy bien su rol.

Con el pasar de los días le conté a Juan que me gustaría que ellos se juntaran a solas. Él me dijo que estaría encantado, por lo que se lo propondría a mi mujer. Así fue como la invitó a su departamento.

Ella, nerviosa por la invitación, dudó en un principio. Y es que sin contar el trío, solo se había acostado conmigo en su vida, entonces le daba un poco de vergüenza ir a la casa de otro hombre a tener sexo. Luego de varias conversaciones acordaron verse en el departamento de Juan.

Así fue como llegó el día. Valeria, muy entusiasmada, se levantó temprano y se fue a la ducha. Tardó más de lo habitual. Al salir me dijo que se había depilado entera (como suele hacer), pero con mayor esmero, ya que quería que le hicieran ese sexo oral del que tanto había disfrutado.

Se puso una lencería bastante provocativa. Para arriba, un sostén que se traslucía totalmente, por lo que dejaba ver sus grandes pezones. Abajo, un colales que hacía juego y también traslucía su vagina. Se veía riquísima.

Salió de la casa y me dijo que iríamos hablando por Whatsapp. Le avisé a Juan que Valeria iba en camino para que saliera a esperarla. El trayecto era largo, así que esos minutos de espera se hicieron eternos.

Al llegar, ambos me avisaron que se habían visto y que subirían al departamento. Luego pasaron varios minutos sin mensajes, hasta que Valeria me escribió que estaba en el baño preparándose. Me contó que en la calle se saludaron de beso en la cara, pero que bastó que entraran al departamento para que Juan le comiera la boca, además de manosearle el culo y las tetas por encima de la ropa. Me envió una foto desvistiéndose y me avisó que saldría del baño solo con ropa interior.

A esas alturas yo ya me estaba tocando, solo imaginando lo que se vendría. Para mi sorpresa, me llamó. Muy suave me dijo que dejaría el celular escondido en algún lugar para que yo escuchara todo lo que hacían.

Salió de la pieza y lo primero que escuché fue a Juan decirle que se veía muy rica. Segundos más tarde, se escucharon los primeros besos. Luego, no sé si fue porque la conozco tanto o qué, pero entendí que le estaban haciendo sexo oral. Esto fue durante muchos minutos y los quejidos iban aumentando en intensidad hasta que llegó el primer orgasmo.

Después escuché cuando ella dijo que era su turno, por lo que comenzó a chupárselo. Finalmente, tras varios minutos, comenzó lo mejor. Empezaron a culiar con todo, por el teléfono se oía cómo la embestía. Puedo decir que incluso fue más fuerte que aquella vez del trío. Culiaron durante mucho rato. La llamada duró un poco más de una hora, donde yo escuché a mi mujer gemir y gritar de placer.

Luego que terminaron el primer round, cortó y me dijo que comerían algo. No supe nada de ella como en una hora, cuando me dijo que había llegado la comida. "Qué hacían en este rato?", pregunté. Ella me contestó que estuvieron conversando, que se quedaron acostados en ropa interior y que él tocaba su cuerpo y la besaba mientras conversaban. Pero cuando llegó a la casa me confesó que eso duró solo unos minutos, ya que Juan se volvió a poner duro rápidamente, por lo que culiaron hasta que llegó la comida y él bajó a buscarla.

Almorzaron (ella siempre en ropa interior) y me envió un nuevo mensaje: “Culiaremos, es el último” y luego de mandarlo, me llamó. Esta vez no dijo nada, solo se escuchaba hablar y besar a Juan. Pronto comenzaron los gemidos. Esta vez la sesión se extendió por poco más de cuarenta minutos. Ella me dijo que a Juan le costaba venirse, lo cual ella disfrutaba y aprovechaba.

Cuando terminó, me dijo que le pidiera un Uber ya que se hacía tarde. Lo hice y éste tardó poco en llegar. Pero Valeria no respondía mis mensajes. Una vez arriba del auto, me contó que la despedida fue muy caliente. Juan no quería que se viniera y trató de convencerla con besos y manoseos. Ella reconoció que estuvo a punto de perder el Uber para culiar una vez más.

Cuando llegó a la casa lo hizo feliz, radiante. Quería contar todos los detalles y yo estaba entusiasmado de oírlos. Me dijo que culió ella encima, ella abajo, en cuatro, de pie, en brazos… que habían hecho poses que ni siquiera conocía. Pero que cada vez le gustaba más culiar con Juan. Él me envió un mensaje agradeciendo la confianza y me envió dos fotos que le tomó antes de follarsela.

Desde ese día, volvimos a repetir nuevamente los tres. Aunque esa es historia para otro relato...

PD: Quien quiera hablarme para preguntar más detalles o cosas, no dude en hacerlo. Yo feliz.

 

Que bueno que le gustó el relato, amigo!!

 

Que bueno que le haya gustado, amigo. A ver si pronto subimos algunas fotitos jeje

 

Jajajaja. De curioso, como se imagina a mi mujer?

 

Es muy rica jeje. Y si, yo disfruto mucho de verla con otro o saber que se la esta culiando alguien mas. Calentura al maximo jejeje