otro desahogo

Hace unos meses estoy teniendo amoríos con mi jefe. Nos vemos en mi casa, en la suya o en algún motel. Esta vez fue en su casa.
Tomamos un sour y nos sentamos en el sillón.
Me sentó en sus piernas y sentí una tremenda protuberancia, moví mi culo arriba abajo y le di un beso de lengua y le dije
- parece que alguien se alegra de verme?
Me respondió
- yo siempre me alegro de verte linda.

Me hizo poner de pie y me dijo que me desnudara. Me quedé parada. Luego el hizo lo mismo

Me confesó que tomó un viagra y cuando se bajo el pantalón se le veía una verga descomunal, algo curva y apuntando al cielo

Me llevó a la cama y se acostó detrás de mi y por debajo de mi torso me agarró una teta a la que le sobaba el pezon, hizo lo mismo con su otra mano y mi otro pecho. Le pasaba la punta de su lengua a la punta de la mia. Hasta que me dijo:

- con cuantos hombres has culiado? Un cuerpo como el tuyo no se satisface solo con tu ex marido.
Yo le respondí que solo con el. Me apreto más fuerte los pezones y me dijo "mentirosa"
Me sentó en su tranca y me empezo a fornicar. Yo empecé a contar de a uno hasta que llegué a 12. Pero habían sido más. No le conté de los clubes swinger a los que me hacía ir Raúl en Madrid, estando casada, ni de las fiestas de intercambio que hacíamos con mis otras compañeras chilenas allá.

Me recostó en la cama de espalda, puso mis piernas en sus hombros y separó mis cachetes con sus manos, me dijo
- ahora llegó la hora de la inyección -
e hizo entrar de a poco su tremenda tranca por mi culo, potenciada con viagra. Pese al lubricante me dolía y yo le pedía que la sacara porque estaba muy gruesa, pero eso parecía alentando más
Me la sacó del culo y me dejó descansar unos 5 minutos hasta que me la clavó por el chocho hasta que me hizo correr. Varias veces. En esa dinámica nos manejamos.

Esto pasó la semana del día de la madre.

Desde principios de año uno de mis alumnos, que estaba metido en la pastoral de la universidad, se me acercaba continuamente y me preguntaba con total descaro que porque me había divorciado,
Insistió tanto que terminé diciéndole que fue por una infidelidad. Me respondió que sospechaba que había sido por algo así.

A la semana siguiente me pidió ayuda para preparar una tutora para alumnos más atrasados, al ser integrante de pastoral no sospeché nada. Estábamos en la oficina y de repente se cortó la luz y sentí un beso muy morboso. Ya sabia que era. Lo aparté con brusquedad y me dio vuelta contra la pared

Me dijo que por ser jefe de pastoral nadie sospechaba de las profesoras que se culiaba. Me puso contra la pared y me clavaba por sobre el pantalón mientras mis tetas estaban aplastadas contra la muralla, mis manos una a cada lado afirmadas por las suyas y el me respiraba en el cuello. Eso me calentaba.

Me recostó forcejeando sobre la mesa y el apoyado sobre mi. Yo grité, pero ya no quedaba nadie. No me decía obscenidades ni yo a él. Por estar tomando anticonceptivos se me agrandaron las tetas y tenia que usar sujetador con broche delantero, tenia maestría pues no tuvo problemas en quitarmelo. Se escuchaban mis suspiros y sus chupetones en mis pezones. Luego de eso me beso con lascivia mientras me sobajeaba las tetas y en el silencio de la oficina se escuchaba la confrontación de las lenguas húmedas dentro de mi boca. En ese momento me entregué; le dije
-tengo pareja-
Y me respondió- me importa un rabano-
Se bajo el pantalón, me quitó la falda y SAS! Ya la tenía clavada adentro y me corrí de inmediato. Yo estaba muy húmeda, me decía que desde que me vio no pensaba en otra cosa que culiarme. Me serrucho un buen rato y varias veces. Me lo echó dentro y subió mis bragas. Me dijo
- para que te lleves un recuerdo de mi -.
Ahora estoy en tremendo lío, eché dos polvos en menos de una semana, con mi jefe y con un alumno.