Lejos quedan ya los días en los que podíamos escuchar a la ex número uno mundial asegurar que no pasaba por su mejor momento. La menor de las hermanas Williams reconocía estar atravesando una depresión debido a su alejamiento de las pistas tras sufrir una embolia pulmonar... Pero a juzgar por las últimas imágenes, parece que Serena ha encontrado la mejor forma de recuperarse. Dejando atrás los problemas, la tenista estadounidense ha retomado una de sus aficiones preferidas: Disfrutar de la playa y del sol acompañada por sus amigas. Asidua a las costas de Miami, Serena se ha dejado ver en esta ocasión luciendo un minúsculo bikini. Siempre conjuntada, el rosa vuelve a ser su color fetiche acompañándolo esta vez con un estampado de tigre. Yo creo que va acá o no?