Aclaro altiro que es un copy paste............... A los hombres nos enseñaron, con toda la buena intención que puede tener una madre falta de training en asuntos de conquista, que con las mujeres hay que ser unos caballeros. Educados, solícitos y sonrientes, como anfitrión de restorán pirulo. ¿Se sirve otra cosa, distinguida dama? ¿Le apetecería un cunnilingus de postre? Un poquito de cortesía de vez en cuando no está mal (Hay que ser un caballero seguro, le escuché decir una vez a un viejo zorro en esto de comerse minas). Pero mamá no nos enseñó que el sistema de modales cambia una vez que la calentura nos hace pasar las barreras de la moral y las buenas costumbres. Por eso en nuestras primeras experiencias sexuales solemos ser medios pavos, excesivamente cuidadosos, como si nos estuviéramos follando a una cáscara de huevo; eso de que a la mujer se la toca con el pétalo de una rosa nos dejó cagados de la cabeza. Uno después va aprendiendo que la cochiná, el dirty talk, las chuchás al aire y hasta los insultos tienen su cabida (¿se espantó? lea esto). Pero la cosa tiene su orden lógico y su progresión. Por ejemplo, partir maraqueando a su mina en la primera cacha puede jugarle en contra y acarrearle un doloroso coitus interruptus. Así que, poniendo nuevamente en marcha a los equipos de investigación que tenemos en Burundi, Togo y Micronesia, intentaremos poner un poco de claridad sobre este asunto. Este post es, a la vez, un catastro de turn-ons, matapasiones y consejos prácticos. ¡Provesho! Weás Que Nunca Jamás Deben Ser Dichas Al Follar Estas frases tendrán el mismo efecto afrodisíaco que pensar en tu abuelita: Hombre No sea flaite: Reina, dama, corazón no son buenos apelativos. ¿Vio? Nunca jamás dé las gracias. No hay nada peor que dar las gracias por una cacha. Agradécele a Jebús y en silencio, hueveta. Evite los autoelogios y la búsqueda de aprobación desesperada: Me veo rico cierto?, ¿cómo estuve?, soy un campeón ¿no? No sea cursi ni arjonesco: Uff toqué las puertas del cielo, me vi sumergido en un remolino de pasión, llegué al éxtasis (mucho peor si en vez de éxtasis dice éctasin). Jamás se refiera a los genitales femeninos como chonfla, choro u otros productos del mar, a menos que se esté follando a la Yasuri Yamilé. Evite cualquier tipo de disculpa o excusa sobre el tamaño de su regalón o su performance: Es que hace frío, es que como soy tan musculoso se ve pequeño en comparación, te aviso al tiro que no duro mucho, etc. Mujer No empiece con los arrepentimientos tardíos: Ay, es que me da susto (eso se dice antes o después, pero no durante), me da cosa, es que hace tiempo que no soy de nadie (doble bonus por flaite) Ni se le ocurra mostrarse asquienta: eeww qué feo, me da como nervios tocarlo, etc. No es momento para andar con inseguridades al desvestirse: pucha es que se me nota el rollito, no me quiero sacar el sostén porque no me gustan mis pechugas, ay no que tengo una cicatriz ahí, etc. Jamás le ponga nombres femeninos al pene. Y ya ponerle nombres tiernitos es como musho. Hacer referencia a otros hombres, sean comparaciones ventajosas o desventajosas, es buscarse una PLR. No lo haga. De más está decir que cualquier frase que insinúe, aunque sea lejanamente, que la otra persona es poco atractiva o mala en la cama es un condorazo feo. Si el o la partner resultó que folla mal, dígaselo después, o mejor aún, no diga ná y salga a buscarse una cachita mejor. Del mismo modo, el elogio sincero siempre es una carta ganadora. Fase 1: Primeras Cachas Usualmente acá hay que tener ojo con lo que se dice, porque la falta de confianza es terreno fértil para malinterpretaciones o rollos. PERO, tal como fuera de la cama, una dosis extra de riesgo y patudez puede acelerar la intimidad. Diga Hombre: Me gusta tu olor, qué guapa te ves sin ropa, qué buena vista que tengo acá (ideal si lo está haciendo a lo perrito), se siente rico eso (referido a un movimiento, una posición, un agarrón, etc), ¿te gusta esto? (ídem, pero dígalo sólo si ella está demostrando que efectivamente le gusta), y otras frases alusivas a sus atributos físicos, salvo su vagina (ver más adelante). NO INSISTA NI REPITA estas frases durante la misma cacha. Mujer: ¿Te gusta esto? (especialmente turn-on para un hombre), qué rico esto, qué rico cómo te mueves, te ves muy rico, ¡ay! sigue así, mmmm, y todo tipo de quejidos, en especial esos picarones que vienen acompañados de una risita. No Diga Hombre: Evite cualquier tipo de epíteto que pueda hacer sentir a la mina como una bataclana o una regalá (eso viene después). Menciones demasiado explícitas a la vagina pueden ser incómodas también. Chulerías como Soy tu papichulo o dámelo rico son para etapas posteriores. No pregunte ¿te gusta esto? si no está seguro de cuál va a ser la respuesta. Mujer: Te veo cansado, Apaguemos la luz mejor, ¿Estás aburrido?, ¿Qué pasa? y otras similares están absolutamente fuera de lugar. Olvídese de preguntar si es la primera vez que hace tal o cual cosa. Fase 2: Una Cierta Confianza En este punto (que puede ocurrir entre la segunda y la quincuagésima tercera cacha) ya las cosas se ponen más entretenidas y picaronas. Aparecen los juegos de personajes y roles. También hay un poco más de espacio para mencionar cosas que no gustaron o incomodaron. Diga Hombre: Pase de la pregunta a la afirmación: Parece que te gusta que te dé por atrás, Te encanta chupármelo, se te nota, Me encanta cuando te pones tan calentona. Ya puede ser más gráfico en sus descripciones: Me excita sentirte húmeda, Tu vagina es una delicia. Juegue a ser chulo y cafichón, premiando sus performances: Mamacita rica, ven con papi, eeso, me encanta cuando te portas mal. Adorne con nalgaditas y tironeos de pelo. Mujer: Ya puede ser más explícita en sus deseos: Me teníai tan caliente, Me moría por follarte, Estoy adicta a tu pico. Tome iniciativa y juegue a ser dominatrix: De ésta no sales vivo, Afírmate que te dejo seco, Eres mi esclavo y tendrás que complacerme. Aumente los quejidos, gruñidos y gritos. No Diga Hombre: Los insultos, todavía no. Jactarse o sobrarse, tampoco es momento. Asimismo, evite que la confianza lo ponga romanticón: Eres el amor de mi vida no es para decirlo follando, aún cuando el éxtasis químico-hormonal le haga sentir tal cosa. Tampoco se ponga poeta o pachamámico, a menos que se haya engrupido a la mina haciéndose el místico o el sensiblón, y por ende las referencias al ying-yang, el sentir profundo del alma y todas esas weás sean parte del show. Mujer: Las referencias a la duración o a la calidad de la performance son para conversarlas después, no en el momento. Así que evite frases del estilo hoy hagámosla cortita, tengo que salir, Espero que duremos un poco más o Trata de apretujarme menos. Fase 3: Full Confianza Si llegó a esta parte, acá hay chipe libre, lo que permite que las cosas se pongan especialmente animalescas. Se puede jugar a la rudeza, al machismo o a la humillación sin que nadie se sienta ofendido. Las nalgaditas ahora son cachetazos. Puede decir un montón de cosas que en fases anteriores podían ser matapasiones. Diga Hombre: Acá ya puede jactarse ridículamente con frases estilo Te dejé tontita o mañana vas a tener que aprender a caminar de nuevo. También puede tratar a su mina de puta o perra sin rollos, o jugar a que la tiene sólo para la cacha. Aplique garabatos e insultos, siempre con gracia (sí, se puede decir maraca con gracia). Mujer: Saque toda su chulería escondida y conviértase en una ninfómana deslenguada: Pónmelo rico papi (pero ojo, es pónmelo, no pónemelo), uuy mi torito, clávame ese cacho, dame tu lechita, y otras que en la vida cotidiana se reservan para las tallas. Póngase de acuerdo con su masho para simular una violación. Grite, chille, exagere si quiere (pero no finja. Gracias). Si encuentra estas cosas de mal gusto, quiere decir que simplemente aún no ha llegado a su nivel máximo de confianza. No Diga Aparte de las Cosas Que No Se Deben Decir Jamás, son bien pocos los límites. Sólo un recordatorio: JAMÁS permita que los insultos o rudezas ofendan el atractivo físico, en especial de las minas. Palabras como fea o cerda están totalmente proscritas. Si se encuentra súbitamente saltándose etapas, lo felicito: es indicador de confianza/intimidad. Esta lista hay que mirarla, más que como un manual de instrucciones, como un checklist para saber qué tan confianzudo/a se encuentra en el ring de cuatro perillas. Fuente Spoiler ¡Debes iniciar sesión para ver el Spoiler!
Muy cierto wn... Conversando con mujeres me han dicho siempre que les aburre que las traten como princesas, que cuando tienen a un hombre que sea salvaje en la cama se vuelven loquitas...
...una vez cuando acamos del maÑamaÑaÑa:b ..al conchesumadre de mi mino se le ocurrio decir.. "mi ex se iba una vez y no podia mas hasta la noche" despues de eso... No lo quise ni tocar... ¬¬
jajajajajajaj este tema es util para rebisar el comportamiento de cada uno con su pareja.... ademas eesta entrenido se agradece
jajajajajaja debo decir que cometi errores pero gracias por decirmee no lo hare denuevo, buena informacion gracias ^^