[cuento corto] El hombre de barro

Rodrigo pasaba horas en el fondo de su hogar. En ese lugar casi nunca llegaba la luz del sol y siempre, pero siempre estaba muy húmedo. Así después de cada jornada de colegio. Rodrigo se instalaba de forma automática ahí, para formar figuras usando el barro que en ese lugar se formaba. Luego de un tiempo comenzó a crear un muñeco de barro, entonces luego de un tiempo aquel muñeco comenzó a tomar la forma de su creador. Después siguieron pasando los días, las semanas y los años, pero Rodrigo seguía acumulando mas y mas barro, además gente extraña le iba ha dejar mas barro a su hogar. Así llego un punto en el cual todo su hogar rebosaba en la suciedad y Rodrigo utilizo mas barro para así aumentar de tamaño a su hombre de barro.

Un día sin previo aviso llego una mujer hasta el hogar de Rodrigo, pero este no salio nunca ha recibirla. La chica vio que no había nadie, pero de igual forma entro y comenzó a caminar por los pasillos. Los cuales parecían verdaderos ríos de fango. Pronto llego hasta la parte final del hogar. Ahí ella se impresiono al ver a un gran hombre de barro y no solo eso si no que también que aquel hombre era igual a Rodrigo sus mismos ojos, sus labios, su nariz y todo lo demás. De repente la chica comenzó a sentir una angustia dentro de los mas profundo de su pecho, además de un frió el cual se le colaba hasta los huesos. Aun así siguió caminando y se paro frente a aquella sucia estatua de Rodrigo, entonces justo en ese momento se percato que detrás de la figura, se encontraba otro mas pequeño. Este también era igual que Rodrigo. La chica corrió hasta el. Ahí la chica descubrió un sonido. El cual se se asemejaba a los latidos de un corazon., entonces la chica impresionada al escuchar esto, decidió ver que había detrás de todo ese barro. Así la chica comenzó a quitar desesperadamente toda esa tierra húmeda y ahí fue cuando su sorpresa fue aun mayor. Detrás de todas las capas de fango se encontraba nada mas que el mismo Rodrigo. Luego de algún tiempo y de mucho trabajo la chica logro quitar hasta el ultimo gramo de suciedad del cuerpo de Rodrigo.
Ahora rodrigo ya se había desecho de todo el barro de su cuerpo y el comenzaba a caminar libre de tan grande peso, entonces el y la chica comenzaron a derribar al gran hombre de barro. Poco a poco derribaron aquella imagen de la casa de Rodrigo, además también se dieron el trabajo de comenzar a quitar toda la mugre que Rodrigo había acumulado en el resto de la casa.
El hogar de Rodrigo por primera vez en mucho tiempo lucia brillante y despampanante como si la luz del sol hubiese llegado a ese frió y oscuro lugar