La niña china atropellada hace una semana por dos vehículos, y que permaneció tendida en la carretera ante la mirada indiferente de los transeuntes, ha fallecido este viernes a consecuencia de las gravísimas heridas sufridas. La muerte la niña de dos años que fue doblemente atropellada por una furgoneta y un camión, y que agonizó mientras una decena de personas pasaban a su lado sin atenderla, ha causado conmoción en la sociedad china. Según recogen varios medios, entre ellos La Vanguardia y ABC, la pequeña, de dos años, falleció en el hospital tras una semana de agonía. Su trágica historia desencadenó una oleada de críticas sobre lo que algunos llaman la inmoralidad de la sociedad moderna. El hospital ha asegurado que "todos los esfuerzos fueron ineficaces" para salvar la vida de la pequeña Wang Yue, que ha fallecido tras más de una semana ingresada en estado crítico, como informa la prensa local. Por su parte, los dos conductores que aplastaron a la niña han sido arrestados, aunque quienes han recibido mayores críticas han sido los transeúntes que no hicieron nada por socorrer a la pequeña y la dejaron morir, después de que se difundiera un video de una cámara de seguridad que registró el brutal suceso. La indiferencia de estas personas ha despertado la indignación de la sociedad china y del resto del mundo. Las imágenes son estremecedoras. Tras ser atropellada, más de una docena de personas pasan durante siete minutos junto a la niña sin preocuparse por socorrerla, hasta que una mujer se acerca y arrastra a la niña hacia un lado de la calle, momento en que aparece su madre, una trabajadora migrante, y se la lleva en brazos. Mucha gente en China no se atreve a ayudar a las personas que parecen estar en peligro por temor a que se les culpe de los sucedido. Varios juicios en el país han terminado con buenos samaritanos obligados a pagar fuertes multas a las personas a las que habían ayudado. fuente Terra.es