andai puro marakeando...jajajaja, conozco a varias que tb habría que hacerles un tatuaje así, pero en frente
FOTO: GUYSPEED.COM La noticia apareció en un oscuro blog. El artista Ryan L. Fitzjerald y su actual ex novia Rosie, ambos residentes en Ohio, EE.UU., son los principales protagonistas de esta historia de venganza y tinta. Rosie acusa a su ex de tatuarle una enorme pila de excremento humeante con moscas revoloteando, en lugar de una encantadora escena de Narnia. Aparentemente, Fitzjerald creyó que su novia lo estaba engañando con un amigo y, en lugar de aclararlo confrontando a las partes, se las rebuscó para vengarse. Antes de tatuarla, y tomándose una botellita de vino con su novia, hizo que ella firmara un formulario de consentimiento antes de tatuarla, que decía que el diseño quedaba a "la discreción del artista". Así que en lugar de la escena de Narnia, Rosie quedó con una enorme pila de bosta en la espalda. La mujer, furiosa, primero trató de acusarlo de lesiones, pero debido a que había firmado el consentimiento tuvo que llegar a un acuerdo por 100 lucas verdes por daños. Ella alega que durante la mayor parte del tiempo en que el artista ejecutó el tatuaje, estuvo desmayada. La noticia apareció en un oscuro blog. El artista Ryan L. Fitzjerald y su actual ex novia Rosie, ambos residentes en Ohio, EE.UU., son los principales protagonistas de esta historia de venganza y tinta. Rosie acusa a su ex de tatuarle una enorme pila de excremento humeante con moscas revoloteando, en lugar de una encantadora escena de Narnia. Aparentemente, Fitzjerald creyó que su novia lo estaba engañando con un amigo y, en lugar de aclararlo confrontando a las partes, se las rebuscó para vengarse. Antes de tatuarla, y tomándose una botellita de vino con su novia, hizo que ella firmara un formulario de consentimiento antes de tatuarla, que decía que el diseño quedaba a "la discreción del artista". Así que en lugar de la escena de Narnia, Rosie quedó con una enorme pila de bosta en la espalda. La mujer, furiosa, primero trató de acusarlo de lesiones, pero debido a que había firmado el consentimiento tuvo que llegar a un acuerdo por 100 lucas verdes por daños. Ella alega que durante la mayor parte del tiempo en que el artista ejecutó el tatuaje, estuvo desmayada. Fuente: DiarioVeloz.com