Una pareja de ancianos va a un restaurante de comida rápida, donde con cuidado divide en dos la hamburguesa y las papas fritas. Un camionero siente pena por ellos y se ofrece a comprarle a la esposa su propia comida. No se preocupe dice el anciano, nosotros compartimos todo. Unos minutos después, el camionero se da cuenta de que la esposa no ha probado bocado. De verdad no me importa comprarle su propia comida insiste. No se preocupe, ella comerá su parte le asegura el anciano. Lo compartimos todo. Poco convencido, el camionero le pregunta a la esposa: ¿Por qué no come? ¡Porque estoy esperando a que mi esposo me preste la dentadura! Un sacerdote, un ministro y un rabino quieren saber quién de ellos es mejor en su trabajo. Se internan en el bosque, encuentran un oso e intentan convertirlo. Más tarde se reúnen los tres. Cuando encontré al oso dice el sacerdote le leí el catecismo y lo rocié con agua bendita. La próxima semana hará su Primera Comunión. Yo encontré a un oso cuenta el ministro, y le prediqué la palabra de Dios. El oso quedó tan sorprendido que me dejó bautizarlo. Ambos voltean a ver al rabino, quien yace en una camilla rodante, con todo el cuerpo enyesado. Pensándolo bien exclama el religioso, quizá no debí haber comenzado con la circuncisión. Hannu quiere que todo salga perfecto durante un viaje de aniversario de bodas al hotel de playa donde él y su esposa pasaron su luna de miel 30 años atrás, así que decide llegar un día antes que su esposa para hacer todos los arreglos. Esa noche le envía un mensaje electrónico, pero se equivoca al escribir la dirección y quien lo recibe es la viuda de un ministro religioso que acaba de morir. Al día siguiente, el hijo de la viuda encuentra a su madre desmayada frente a la computadora. En la pantalla ve el siguiente mensaje electrónico: Querida esposa: Acabo de llegar y todo está listo para tu arribo el día de mañana. Espero que tu viaje sea tan placentero como el mío. P.D. ¡Hace muchísimo calor! Un hombre de negocios visita a un buen amigo chino suyo en el hospital. Li kai yang qi guan dice débilmente el hombre enfermo. El ejecutivo desea ayudarlo, pero no habla mandarín. ¡Li kai yang qi guan! exclama el paciente antes de exhalar su último suspiro. Más tarde ese año, el hombre de negocios viaja a Shangai, donde por fin conoce el significado de Li kai yang qi guan: Quítate del tubo de oxígeno. En pleno otoño, los indios de una reservación muy lejana le preguntan a su nuevo jefe si el próximo invierno será frío o templado. Ya que el jefe pertenece a una generación moderna y jamás aprendió los viejos secretos de sus ancestros, mira al cielo y no puede predecir qué va a suceder con el clima. Aun así, les advierte que recojan leña. Como es un hombre práctico, poco tiempo después llama por teléfono al Servicio Meteorológico Nacional. ¿El próximo invierno será muy frío? pregunta. Es probable le contestan. El jefe vuelve con su pueblo y les dice que se pongan a juntar más leña. Una semana después, llama de nuevo por teléfono. ¿Será un invierno muy frío? vuelve a preguntar. Sí, será un invierno muy frío le responden. El jefe vuelve a ordenar a su gente recolectar toda la leña que puedan. Dos semanas más tarde, el jefe hace otra llamada telefónica: ¿Están seguros de que el próximo invierno será muy frío? Completamente le contestan. Va a ser uno de los inviernos más fríos que se hayan conocido. ¿Y cómo están tan seguros? indaga el jefe. ¡Porque los indios están juntando leña como locos! Tras una persecución a alta velocidad, a Vlad lo detiene un oficial de policía. ¡Ésta es la mayor diversión que he tenido en todo el día! exclama el oficial. Si me da una buena excusa, no le daré una multa. Hace tres semanas le explica Vlad, mi esposa me dejó por un policía. Así que cuando vi que usted se acercaba en su auto, ¡creí que trataba de devolvérmela! ahi estan, ojala no esten muy repetidos