Me encanta esta anécdota XD Como ya se sabe, los aztecas llegaron al valle de México desde otra región, al llegar fueron vistos como un peligro y los señores ya establecido recelaron de ellos. Así que el señor de Culhuacán les asignó un terreno infértil, pedregoso y lleno de víboras y demás alimañas. Sin embargo los aztecas inesperadamente prosperaron (lograron cultivar, aprovecharon la gran cantidad de piedra y se alimentaron de las víboras XD). Con el tiempo, el señor de Culhuacán llegó a considerarlos como sus aliados debido a su bravura en la batalla. Acá va lo bueno. Un día, siguiendo el consejo de sus sacerdotes, los aztecas se presentaron ante el señor de Culhuacán para pedirle una cosa: los aztecas querían a la hija de éste para convertirla en su diosa. El señor obviamente aceptó gustoso y les dio a su hija. Lo que no sabía era que el ritual azteca consistía en desollar a la persona elegida, o sea, quitarle la piel. Pobre princesa =/ Después invitaron al señor de Culhuacán a la ceremonia en donde salió un sacerdote vestido con la piel de su hija... en un principio el señor no se dio cuenta, pero luego lo supo. Y por supuesto, el pobre padre declaró guerra y los persiguió... pero esa ya es otra historia que derivó en la fundación de México Tenochtitlán n_n Ah, por cierto, se cree que la nueva diosa fue llamada Toci o Tonanzin, y fue esposa del dios Huitzilopochtli... al menos... Huitzilopochtli