1. Muchas veces poco, antes que pocas veces mucho Se logran mejores resultados cuando se comen entre cinco a seis comidas pequeñas por día, antes que tres comidas grandes. Comiendo 300 a 400 calorías cada tres o cuatro horas, se puede mantener el azúcar de la sangre en un nivel fijo y evitar el hambre continuo. Es importante que se realice un consumo equilibrado de proteínas (20 al 25 por ciento), carbohidratos (55 al 60 por ciento) y grasa (15 al 25 por ciento). 2. Carbohidratos Las legumbres, frutas y verduras con fibra bajan el riesgo de sufrir diabetes Tipo 2 y proporcionan vitaminas en abundancia. Por otro lado, los carbohidratos refinados y simples, como por ejemplo, el pan blanco y las papas, provocan grandes variaciones de los niveles de insulina y pueden estimular el hambre. 3. No evite las grasas Solo come las correctas, en cantidades correctas. Los ácidos grasos omega-6 y omega-3, que se encuentran en casi todos los pescados y algunas nueces, mantienen la sensación de saciedad y reducen verdaderamente los niveles de colesterol "malo". Escoge las grasas que se encuentra en las aceitunas, la palta, y las nueces, antes que las grasas saturadas que se encuentran en la carne y los lácteos. 4. Toma abundante agua El agua es el mejor líquido para el cuerpo, y tiene cero calorías. Bébela en lugar de las gaseosas, los jugos artificiales y el alcohol, que tienen muchas calorías pero poco o nada de valor nutritivo. 5. Mantén un registro alimenticio Cuando midas las calorías consumidas en el día, será fácil olvidar las dos galletitas que picaste por la tarde, o el vaso de vino que tomaste con la cena a menos que tengas todo esto por escrito. El registro de alimentos es también útil para identificar y cambiar ciertos patrones de alimentación. 6. Ejercicio físico Ningún programa de pérdida de peso será completo sin un ejercicio regular. Pero de hecho, el ejercicio no sólo es útil cuando se trata de bajar unos kilitos, sino que numerosos estudios han confirmado que son extremadamente importantes para conservar el peso. Un buen y completo programa de ejercicios, debería incluir ejercicios aeróbicos así como entrenamientos de fuerza y flexibilidad.
Sobre las carnes rojas me llama la atención que pongas que hay que evitarlas. Ya que las carnes rojas es muy bueno consumirlas cada 3 días con su grasa respectiva.