La Dra. Cordero relata que en su juventud tuvo las tetas casi del tamaño de las grandes tetas de Perla. Se hace más entendible la actitud calentona de Fernando Villegas, de haberse atrevido a tocar esas grandes tetas llenas de leche en polvo.
Jajajaja, esta vieja puede ser más pesa que la mierda, pero me cae re bien, la quiero como abuela En todo caso todo puede ser, con tiempo las partes del cuerpo suelen someterse a la grave-edad D: