En Roma invadieron el río Tiber peces que comen palomas y perros

Se trata de siluros gigantes que llegarían a medir más de 3 metros. En las orillas del río Tiber, en Roma, tratan de capturar aves, ratas, pequeños mamíferos e incluso humanos.







Peces gigantes y hambrientos se han apoderado de las aguas del Tíber y de otros muchos ríos. Según afirman investigadores de la Universidad de Toulouse, en Francia, sus mutaciones se deben a la extraña dieta adoptada.

La degradación del ecosistema natural del río hizo que, frente a la falta de su alimentación principal, como algas o peces pequeños, los siluros se lanzasen a cazar otro tipo de presas, tal y como se ve en el video, incluyendo palomas, pequeños mamíferos como perros y gatos o carroña.

En el río Ebro, en España, también es común encontrar estos peces mutantes que amenazan la fauna y flora del lugar. Muchos pescadores suelen aventurarse en lograr hallar el espécimen de mayor tamaño.

El siluro es un pez que se adapta muy bien a diferentes hábitats, procedentes de los grandes ríos de Europa fueron introducidos en Italia y España causando, como vemos, estragos.


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