Una mujer de 40 años sufre un cuadro agudo y es sometida a una cirugía de hígado de urgencia. Mientras está en la mesa de operaciones tiene una experiencia cercana a la muerte: Ve a Dios y le pregunta ¿Señor me voy a morir? Tranquila hija mía, vivirás 40 o 50 años más le contesta Dios. La mujer muy contenta se recupera y decide aprovechar su estadía en el hospital: Se hace una liposucción en muslos y abdomen. Ya recuperada, inicia 120 sesiones de gimnasia, pilates y gimnasia modeladora. Nuevamente ingresa a la clínica: se levanta y rellena las tetas, se pone poto, se respinga la nariz, silicona en los labios, fuera las arrugas, la papada y las patas de gallo. Se hace microcirugía de várices, se corchetea el estómago para comer menos, se saca las dos costillas inferiores para afinar la cintura. O sea, un recauchaje general para verse joven y bonita los 40 o 50 años que le quedan. Sale de la clínica después de su última operación, atraviesa la calle y una ambulancia la atropella y ¡¡¡MUERE!!! [TABLE] [TR] [TD]Otra vez frente a Dios, le pregunta indignada: ¡¡¡ Señor, porque me hiciste esto!!!.. ¡¡ ¿No me dijiste que viviría 30 o 40 años más? !! . . . . .. . . . . . . Dios la mira perplejo y le dice: ¡¡¡ Güevona !!! TE JURO QUE NO TE RECONOCI...!!! [/TD] [/TR] [/TABLE] y al que no le gustó.. Si estaba lo borran