¿Mito urbano? No lo sé, el mensaje que entrega es lo importante.

Tema en 'Debates' iniciado por squall2k, 8 Ene 2014.

  1. squall2k

    squall2k Usuario Nuevo nvl. 1
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    Los hijos son lo más importante en la vida, y pensando en eso recordé una historia que escuché hace ya bastante tiempo… Una historia que te deja pensando en que no hay nada más importante que tu pequeño/a…

    Un padre soltero vivía con su hijo de 4 años en una modesta casita, en una tranquila población de Antofagasta. Él era un hombre joven dedicado a su trabajo y a su pequeño, que sacrificaba todo para salir adelante como cualquier chileno en nuestro país. Durante 3 años ahorró dinero para darse el placer de comprar un autito el cuál ocuparía para poder salir con su hijo los fines de semana. Su idea era rellenar cuadernos con fotografías tomadas en distintas partes, disfrutando juntos de las risas y de esos momentos que pocos padres logran dedicarles a sus hijos… Él sabía que su trabajo lo alejaba del pequeño la mayor parte de la semana, incluso trabajaba los sábados y el domingo lo compensaba pasando todo el día jugando con su chiquito, pero al pequeño le aburría la rutina y su padre pensaba en lo genial que sería poder salir a pasear a otras partes, generar recuerdos, sacar fotos, hacer que el poco tiempo que tenía para su bebé fuera inolvidable, etc.
    Muy contento y con el fruto del esfuerzo ahora la familia tenía un nuevo integrante de cuatro ruedas, el padre feliz acostó a su pequeño a dormir diciéndole que tendrían un fin de semana espectacular, que tenía que descansar. Era jueves y como cualquier jueves había que acostarse temprano porque el viernes el trabajo era un poco más agitado debido a que en la empresa donde trabajaba siempre dejaba la mayor carga para el último día de la semana, pero eso no le preocupaba pues finalizando su larga semana laboral podría salir por primera vez con su hijo, en su auto a donde sea que los lleve el camino.
    El viernes inició como cualquier otro, su hijo dormía y el recibía a la nana antes de partir… Pensó en ir en auto pero finalmente decidió dejarlo, ya lo ocuparía el domingo para salir con su hijo y eso de pillar estacionamiento no le llamaba la atención particularmente para un día viernes donde tenía que llegar a la hora.
    Durante la tarde el niño salió a jugar y emocionado miraba el auto tan lindo que su padre había comprado… Mientras la nana hacía el aseo el chimuelo tomó una piedra y comenzó a dibujar en el auto de papá lo que esperaba fuera una increíble sorpresa, y así trató de trazar la forma de un gato, luego de un perro y de todas las cosas que en ese momento pasaban por su mente. Esa piedra era para él un pincel y el auto, su lienzo.
    Calló la tarde y papá llegaba a casa exhausto, abrió la reja y posteriormente el portón que lo situaría a la entrada de su casa, donde se encontraba el auto. Al abrir el portón, sintió como su corazón se apretó y un vacío llenó su propia esencia al ver tan crudo suceso, su auto estaba completamente rayado, destruido por fuera, con un daño irreversible para los escasos recursos que poseía. Las lágrimas no se hicieron esperar…
    Tomó sus llaves y con desesperación abrió las puertas de la casa, entró gritando el nombre de la nana quién con miedo respondía “Disculpe, fue el niño, no lo vi, ¡no lo vi!”… Rápidamente la nana tomó sus cosas y se fue sin más, temerosa del estado del hombre que parecía en estado de pánico… Entonces el pequeño se acerca con un camión de juguete en mano y mira a su padre, asustado porque sabía que algo no andaba bien… Su padre entonces comienza a gritarle, llorando, preguntándole porqué había hecho eso, porqué había rayado el auto... Pero el niño no respondía, no entendía que estaba pasando... Su padre entonces lo cogió del brazo y el niño dejó caer su camioncito, “¡Nunca más, nunca más! ¡Eso no se hace! ¡Eso está mal!” gritaba y con euforia comenzó a golpear las manos del infante… El niño lloraba y no podía zafarse, intentaba tirarse al suelo pero no encontraba protección y solo podía llorar.
    Después de un rato de castigo, el padre aun enojado pero un poco más calmo, envía a su hijo a dormir más temprano “¡Y ya no llores! ¡No saldremos este domingo! ¡Ahora no podemos por lo que hiciste!” y el pequeño corrió a su habitación y se acostó en su cama donde lloró durante alrededor de una hora.
    El padre una vez tranquilo, fue a la habitación del pequeño con remordimientos por haber sido tan duro, pero el pequeño yacía en su cama durmiendo, tapado hasta la cabeza.
    Papá se sentía mal pues ahora reaccionaba y veía que se le había pasado la mano, que su hijo es solo un niño y que no sabía lo que hacía, mañana se disculparía con él e intentaría explicarle porqué fue amonestado, “pobrecito”, pensaba… “soy un mal padre”… Posteriormente a eso fue a mirar su auto una vez más y luego se fue dormir, pues al otro día tenía su último día de trabajo que finalizaba a medio día.
    Al otro día a eso de las 11:20am, papá recibe una llamada inusual. Era la nana que lo llamaba desde el hospital, le decía que su pequeño tuvo que ir a urgencias a eso de las 9am, que no paraba de llorar, que sentía mucho dolor y no se podía mover. Ella no lo había llamado antes porque creía que no era algo muy serio, pero ahora ya no estaba segura pues la habían hecho esperar mucho tiempo. Él por su parte, tomó sus cosas y cogió la primera micro que encontró, su preocupación creció tanto que le costaba respirar porque nunca había pasado algo similar, ni siquiera pidió permiso en su trabajo para salir, simplemente abandonó todo y se fue y lo único en su mente era que su hijo estuviera bien…
    Llegando al hospital preguntaba por el pequeño y lo dirigieron a un pabellón donde le atendería un médico.
    “¿Usted es el padre del pequeño que ingresó esta mañana? El niño está en esta sala y fue operado, el dolor sin embargo no lo deja dormir y no podemos anestesiarlo más…”
    Las palabras del doctor solo asustaron al padre que no entendía nada, entró rápidamente a la sala donde una camilla se encontraba en el centro y sobre ella, su hijo lloraba.
    “Papá… (Snif)… Te prometo… que no voy a jugar más con el auto… pero devuélveme mis manitos”
    Su padre quien ahora bajaba la mirada, notó como en las extremidades de su pequeño solo habían vendas sobre vendas.
    Su padre, en silencio se retiró sin escuchar lo que el médico le decía y saliendo del hospital se lanzó al tránsito, perdiendo la vida.

    No sé si esta historia será real o ficticia, honestamente espero que no y algo me lleva a pensar que solo es un mito urbano pero… Me gustaría que la gente tome conciencia de que hay formas y formas de educar a los hijos y la violencia siempre será la peor de ellas. Los hijos son un tesoro, un tesoro que debemos cuidar porque ellos confían en nuestra protección, confían en nuestro amor, y depositan su vida en nuestras manos. A los hijos se les ama, no se les pega… Yo no sé qué haría sin mi bebé.

    Te amo mi peteño, eres lo más importante en mi vida y te cuidaré, te amaré y protegeré por siempre.
     
  2. jotaromerom

    jotaromerom Usuario Casual nvl. 2
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    Me fui a la ultima linea de puro pajero...y dice "peteño" ..eso es como un pete pascuense?
     
  3. squall2k

    squall2k Usuario Nuevo nvl. 1
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    Jajaja, no... Lo cierto es que "peteño" es como "pequeño" pero en vez de poner "qu" puse una "t"...
     
  4. Ignacio.015

    Ignacio.015 Usuario Nuevo nvl. 1
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    Buena la historia, Yo soy de esos que no quieren tener hijos, pero si por alguna razon tengo uno, jamas lo golpearia, ya que como dices, "hay muchas formas de Educar y la violencia siempre sera la peor de ellas"...
     
  5. Lleporello

    Lleporello Usuario Casual nvl. 2
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    creo que es una leyenda urbana porque había oído la misma historia pero con variantes. Como que en vez de dibujar animales el niño había querido cepillar el auto y había usado uno de esos cepillos de alambre. Y la historia no transcurría en Antofagasta sino que en Puerto Montt....Pero bueno, a los niños no se les pega.
     
  6. Carsa-77

    Carsa-77 Usuario Nuevo nvl. 1
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    me la contó mi profe de lenguaje en séptimo básico, pero con la diferencia que al niño le habían amputado las manos, porque el papá le pegó tan fuerte que las manos del niño quedaron muertas. El remate era el mismo y para mi en ese entonces me dio pena. Mas que mito o leyenda, vendría a hacer una historia con moraleja, no se si caberá en el concepto de fábula.
    Saludos!
     
  7. billypalito

    billypalito Usuario Casual nvl. 2
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    ya, la historia algo tiene pero la encontré super mala xD es cursi y el remate es super melodramático, como mierda enseñarle al hijo a ser consciente y el weon después de sentir culpa por lo que hace lo deja solo, ridículo, osea, lastima más a tu hijo después de haberlo lastimado
     
  8. edu78

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    jajja iba a decir exactamente lo mismo, la historia no tiene sentido, es extremadamente cursi, no hay moraleja, los sucesos carecen de lógica, y el remate... UFFF!!!!
    esta mas o menos bien contada, pero la historia es la mala.
    y pa mas remate largo.
     
    #8 edu78, 12 Ene 2014
    Última edición: 12 Ene 2014