Ex rehén de las FARC afirma que Ingrid Betancourt se robaba la comida

Los tres estadounidenses que fueron rehenes de las FARC 1.967 días pusieron a la venta en Estados Unidos el libro "Out of Captivity", donde revelan el comportamiento humano y, en especial, el de la ex candidata presidencial colombiana Ingrid Betancourt.

Thomas Howes, Keith Stansell y Marc Gonsalves, los tres estadounidenses secuestrados por las FARC, relatan ayudados por el escritor Gary Brozek los pormenores de su experiencia en las selvas colombianas como rehenes de la guerrilla. El libro hace hincapié en el espectacular rescate que el 2 de julio de 2008 los condujo a la libertad, junto a Ingrid Betancourt y once policías y militares colombianos.

Uno de los empleados de Northrop Grumman afirma que la política colombo-francesa se mostró como una persona altiva, egocéntrica, que robaba comida, ocultaba libros e incluso acusaba frente a los rebeldes a los tres norteamericanos de ser agentes de la CIA.

"La vi intentar querer asumir el control del campamento con una arrogancia que estaba fuera de control", dijo Keith Stansell a The Associated Press en una entrevista.

"Algunos de los guardias nos trataron mejor que ella", dijo el ex infante de marina de 44 años, uno de los rescatados junto con Betancourt y sus compañeros contratistas Thomas Howes y Marc Gonsalves y 11 secuestrados más en el operación ‘Jaque’ .

Por su parte, El ex senador Luis Eladio Pérez, quien también estaba secuestrado en el campamento cuando llegaron los tres estadounidenses, negó que Betancourt alguna vez le dijera a las Farc que los estadounidenses fueran de la CIA.

Otro de los rehenes estadounidenses, Thomas Howes, también destacó las ansias de controlar y manipular de Betancourt y "eso en cautiverio es una cosa muy difícil" señaló ayer Howes en un entrevista telefónica desde su país con la radio bogotana La FM.

El norteamericano agregó que en los años de secuestro que compartió con Betancourt pudo ver que la ex candidata presidencial colombiana era "una persona interesada en ella misma".

La colombiana llegó a extremos como el de "no querer compartir la comida en partes iguales", aseguró Howes, aunque también reconoció que "es una persona carismática, inteligente, muy divertida".

Sin embargo, sostuvo que Betancourt tiene ese otro lado que "puede llegar a ser desagradable".