Hola muchachos, les traigo un maravilloso Copy/Paste de por ahí, sobre una leyenda del pueblo San José de Maipo. [FONT=Arial, Helvetica, sans-serif]De los muchos personajes que tienen gran fama en las leyendas, Satanás es uno de los más importantes y de los que se ha contado más historias en nuestro país. Es un personaje que llegó a América junto a la frase por la cruz o la espada, y que de la mano de los mitos del cielo e infierno llenaron los cuentos orales de las razas autóctonas y posteriormente de los criollos y mestizos de las tierras de Chile. [/FONT][FONT=Arial, Helvetica, sans-serif]En la zona del Cajón del Maipo, como en el resto del país, abundan muchas historias respecto a este ya popular personaje. Entre esas leyendas figura la de su pata. Todo surgió a raíz de una antigua historia que habla de un extraño hombre que llegó hace muchos años a este pueblo. Alto como un roble, vestido completamente de negro y con una mirada que asustaba e intrigaba a cualquiera. También gustaba de enamorar a las muchachas jóvenes que lo miraban. Un día de sol ardiente lo encontraron tratando de violar a la hija del alcalde, que estaba destinada por su padre para ingresar a un convento de monjas. Grande fue el escándalo que ocurrió, pero nadie se atrevió a hacer o decirle algo a este hombre-diablo, mientras que él mataba a quien le daba la gana sólo con mirarlos. [/FONT] [FONT=Arial, Helvetica, sans-serif]Cuentan que una noche de fuerte temporal, por el sector de El Toyo, abandonado de suerte, pidió alojamiento por esa noche en un convento de monjas clarisas que había en ese sector. Fue aceptado por esa noche para que durmiera en un cuartito que había detrás de la despensa. Ocurrió que cuando todas las religiosas se habían dormido, el diablo fue a la habitación de una de las novicias, nada menos que la hija del alcalde. La tomó en brazos y salió huyendo a gran velocidad del lugar, creyendo que nadie le había visto u oído.[/FONT] [FONT=Arial, Helvetica, sans-serif] [/FONT] [FONT=Arial, Helvetica, sans-serif]Pero la madre superiora, una monja de gran carácter, que escuchó los ruidos de las botas del diablo, salió y tomó el agua bendita de la capilla y le dio alcance. Invocando a Dios lo expulsó del lugar en el sector donde se construiría el famoso puente colgante. El diablo, tomando forma de un gigante, saltó la separación entre el río y los cerros y dejó marcado sus pies y manos. Una de las pisadas quedó impresa en donde hoy se encuentra una parada para tomar el autobús que recorre desde San Alfonso hasta Santiago. Desde ese entonces, en ese sector, el diablo no se ha vuelto a aparecer, aunque sí en otras partes. Posteriormente a estos hechos que conmocionaron a la comunidad, las monjas se marcharon del hermoso lugar que las había cobijado tanto tiempo.[/FONT] Ya cabros, comenten... Seguramente muchos la conocen, yo, me la sabía porque mis viejos son de allá... Saludos!
wena compadre me gusto la historia cuanto tiempo sin ir pal cajon mis mejores recuerdos de mi infancia los poase alla nunca abia oido de esa historia
en mi region,,,,,,,la region de atacama tenemos caletas.....como LAS 4 PUERTAS EN EL SECTOR DE HACIENDA TOLEDO......MUY BUENA. trata de buscarla te la recomiendo
En mi pueblo, al interior de San Fernando, había otra pata del diablo... como ven prácticamente en todo Chile se anduvo paseando... (Por qué sólo deja una huella? quizá iba pegando saltos gigantescos...)