http://img141.*************/img141/851/eco412.jpg Un buen obstetra debiera brindar toda la información necesaria para la tranquilidad de la futura madre, pero lo cierto es que algunos profesionales confían en que sus pacientes están al tanto de todo el proceso. En la práctica -y a menos que sea un médico especialista en el tema- usted no tendría por qué conocer al dedillo todo lo que ocurre en este periodo y en ese sentido, está en todo su derecho de hacer las preguntas que estime convenientes. ¿Cuántas ecografías? Según la Sociedad Chilena de Ultrasonografía, en un embarazo normal se practican entre tres y cuatro exámenes de ultrasonido (ecografías) que tienen diferentes objetivos, dependiendo del momento del embarazo y de su estado de salud. Por ejemplo, si se trata de un embarazo de riesgo o el futuro bebé tiene una condición especial, lo más probable es que el especialista solicite más exámenes, entre ellos, algunas ecografías extras. En términos estrictamente médicos, la indicación es realizar un número limitado de ecografías durante el embarazo,hasta el momento no hay estudios que comprueben que exista algún daño al hacer muchas ecografías, y si así fuera, los beneficios que esta técnica puede entregar son mucho mayores que los riesgos. Los adelantos en tecnología han llevado a que hoy en día existan más equipos portátiles en las consultas médicas, lo que llevará -a juicio de este especialista-a que en el corto plazo las ecografías en todos los controles se conviertan en una práctica rutinaria. ¿Qué revelan? Además de los objetivos particulares de cada ecografía, éstas permiten al especialista hacer mediciones de diferentes segmentos corporales (cabeza, abdomen, brazos y muslos). Con estas mediciones se determinará si cada segmento se ubica en el rango de normalidad. La primera ecografía se efectúa generalmente por vía vaginal, antes de las 10 semanas de embarazo. Sirve para confirmar el diagnóstico, precisar la ubicación e implantación del embrión y el tiempo exacto de gestación. Permite además oír los latidos cardiacos del bebé, observar su estructura, crecimiento, las condiciones del saco que lo envuelve y verificar si se trata de un embarazo múltiple.Teniendo en cuenta esos antecedentes, durante este examen podría consultar con el especialista si la edad gestacional que revela la ecografía coincide con la fecha que usted tiene (según el día de la última regla o el día de la fecundación, de acuerdo a sus cálculos). También puede consultar si existe la probabilidad de que sean dos o más bebés.Entre las 12 y las 15 semanas se puede realizar una segunda ecografía, que busca evaluar la constitución anatómica del bebé, para descartar anormalidades estructurales o genéticas. En esta ecografía y, especialmente en la siguiente, podrá preguntarle al profesional si ya es posible descartar malformaciones y otro tipo de condiciones especiales, como síndrome de Down o labio leporino. La tercera se realiza entre las semanas 22 a 26 y sirve para determinar en términos muy precisos la anatomía fetal y la irrigación uterina placentaria. Permite diagnosticar alteraciones anatómicas severas y medir el largo y características del cuello uterino. Con este examen se pueden descartar alteraciones como labio leporino, problemas en la columna, en el corazón y riñones, entre otras. Se sigue controlando el crecimiento del feto y la placenta. En esta ecografía ya puede preguntar sobre el sexo del bebé, a menos que éste decida esconderse hasta el final del embarazo.La cuarta ecografía se practica generalmente en el octavo mes de embarazo. Su propósito será entregar una evaluación total del desarrollo fetal, su vitalidad, el buen funcionamiento de la placenta, la normalidad en el volumen del líquido amniótico y la estimación del peso y talla del bebé.En esta ecografía puede confirmar el sexo del bebé, consultar si su peso y talla corresponden a su edad gestacional y si ya está bien ubicado (encajado) para el parto. También puede preguntar por el ritmo de los movimientos del bebé; hay algunos que por esta época comienzan a moverse menos, lo que podría revelar que ya esté por nacer o bien, que exista algún problema, lo cual puede descartarse precisamente a través de la ecografía.Lo más importante al momento de hacerse estos exámenes es que sean realizados por profesionales debidamente preparados, especialistas en ultrasonido, para identificar los signos y posibles riesgos del bebé. ¿Ecografía tradicional, Doopler o tridimensional? Las ecografías pueden ser básicamente de tres tipos: Convencional. Es la ecografía tradicionalmente utilizada, en dos dimensiones. Doopler color o Ecotomografía vascular. Mide la cantidad de fluido que circula por los vasos sanguíneos del feto. Se recurre a ella cuando hay dudas acerca del flujo normal de sangre entre madre e hijo, malformaciones en el corazón del feto o problemas maternos. 3D o 4D. Las ecografías tridimensionales permiten visualizar al bebé claramente, con sus facciones y gestos. Se recomienda a embarazadas de alto riesgo y a aquellas que presentan fetos con algún tipo de malformación, ya que ayuda en la precisión del diagnóstico. A ello se agrega la cuarta dimensión, es decir, el factor tiempo, de modo que los movimientos del bebé pueden observarse en pantalla, casi en tiempo real.
3 a 4 nomás...^^U Desde las 7 semanas, en que supe que estaba embarazada, tuve ecografías en cada consulta a la que iba, junto con el video de la mona chica. No sé cuantas habrán sido en total, pero fué la ventaja de que la Doc que me atendía, tenía todo su equipo al alcance. Y esta mona no se mostró hasta los 8 meses, pero yo ya sabía que era niñita.
Yo me hice como 12 ecografias y de ellas 3 lo vi en 3 d y una de ella fue completa en 4d Lo mas hermoso de la vida, enserio!
gracias por la info, también he sacado como unas 5 preguntitas para cuando vaya a hacer la eco con mi amor. :super: