Ley de tabaco chilena será aun más dura

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Parlamentarios de la comisión de Salud de la Cámara Alta aprobaron de manera unánime la ley para que todo espacio cerrado y público este libre del humo del cigarrillo. Por esto la próxima semana el ejecutivo despachará el proyecto de ley de tabaco al Senado.

El problema del tabaquismo afecta enormemente a la salud de una gran parte de los chilenos y además hace perder millones de dólares a la salud pública financiada por el Estado. De todos modos no se puede llegar y votar la ley, ya que no hace mucho millones de comerciantes con lugares de atención al público arreglaron sus locales comerciales para que tuviesen zona de fumadores y no fumadores; para ellos que se prohíba fumar en todo recinto privado es una burla a sus bolsillos.

“No se puede legislar de forma apurada e improvisando, tenemos que buscar la mejor solución para que exista una ley que dure por muchos años. Lo que queremos es prevenir enfermedades crónicas, y evitar la muerte, pero lamentablemente hasta ahora no hay ningún estudio que diga que el tabaco no hace daño a la salud. Al contrario, todos coinciden en que existe una relación directa entre consumo de tabaco y enfermedades crónicas como cardiovasculares y el cáncer”. Señaló el senador de Unión Demócrata Independiente (UDI), Gonzalo Uriarte.

Una de las partes más cuestionables del proyecto si realmente se atenta contra las libertades de los fumadores o la salud de la personas, otro punto cuestionable es conocer los verdaderos intereses de los senadores ¿trabajan por la gente o por los miles de millones que mueven las tabacaleras?

Según Uriarte “en la Comisión hemos avanzado mucho y espero que la próxima semana dicho proyecto. Sin embargo, quedó pendiente la discusión más constitucional de una norma para la siguiente sesión; nos interesa saber qué pasará con las producciones cinematográficas, los videos y documentales, que provengan de extranjero, si éstos influyen o no en nuestra garantía constitucional, la idea es que las personas no aparezcan fumando o mostrando la marca de un cigarrillo”.

La relación del cigarro y el cine lleva casi un siglo, en Estados Unidos los actores del momento eran “mojados” por las industrias tabacaleras transnacionales para que mostrarán sus productos en películas, el garbo y la elegancia de un fumador cinematográfico quiso ser imitado por miles, sin duda uno de los mayores éxitos publicitarios del cilindro de tabaco.

El senador del Partido Socialista (PS), Fluvio Rossi, reconoció hace poco ante la opinión pública que era un fumador de marihuana. Sin embargo, su postura con el cigarrillo no es tan empática desde el punto de vista sanitario: “Estamos logrando un buen proyecto, porque de alguna manera protegemos a los menores, no solamente en los espacios cerrados, sino también en los abiertos. Sabemos que los menores asisten a recintos deportivos, espectáculos artísticos culturales y si él se encuentra, por ejemplo, en un estadio y alguien está fumando al lado de él, le está contaminado el aire que respira y promoviendo enfermedades”.

Es de esperar que los senadores “no se equivoquen” en votar como lo hicieron los diputados cuando rechazaron la ley y logren velar por los ciudadanos que los eligen.

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