El coleccionista que emocionó al Loco

Cuando Cristopher supo que Bielsa se iba, hizo lo imposible y consiguió camiseta de "Ñuls". La joya se la entregó en el búnker.
Un nervioso Cristopher Antúnez tocó el portón de Juan Pinto Durán y preguntó por Marcelo Bielsa. El guardia le respondió: "Lo siento, don Marcelo lo esperó entre las 12.00 y las 12.05".
"Me quería morir, estaba atrasado 15 minutos por culpa de un taco. Pero insistí, pese a que sé de la disciplina de Bielsa", recordó el miembro del programa radial "La Magia Azul", representante del local deportivo la "Tienda del 10" y, además, coleccionista de camisetas.
Esta historia, que terminó con Bielsa y Antúnez conversando en un banquito de Juan Pinto Durán, comenzó en marzo de 2009, luego del triunfo de Chile sobre Perú en Lima por 3-1.
"Bielsa estaba muy parco en la conferencia y yo le aposté a un periodista que le podía sacar una sonrisa. Cuando se retiraba le digo '¡aguante, Newells!'. Quedó petrificado, se dio vuelta y me abrazó", dijo Cristopher.
Desde ese momento, Antúnez se puso como objetivo dejar loco al Loco: "Soy coleccionista y quise conseguir una camiseta, pero una especial, una difícil". Un amigo, el "Peruano", lo ayudó y "conseguí la de 'Ñuls' del '72, con números de cuero en la espalda hace un año, pero no me animé a entregársela a Bielsa", sigue el relato Antúnez.
Pero todo cambió cuando supo que don Chifli no iba a seguir al mando de la Roja, por lo que Cristopher movió cielo y tierra y consiguió una cita con el rosarino. "Esta historia es muy personal, pero la hago pública para que sepan la calidad de ser humano que es Bielsa", explicó el coleccionista.
- Entonces, ¿te recibió?
- Sí, apareció, me saludó con un "bienvenido a Juan Pinto Durán, es un gusto" y yo, muy canchero, le dije 'hola, Marcelo'. Me preguntó para qué lo quería ver y le respondí que yo sabía de su sentimiento por Newells, le mostré la camiseta y abrió las tremendas pepas, emocionado.
- ¿Qué hizo con ella?
- Le puso mi nombre en el cuello. "A mí me enseñaron de chico a ser agradecido", me dijo y me preguntó "¿qué puedo hacer por usted?"
- ¿Quedarse en Chile?
- No se va a quedar, es un hombre de principios y eso que le dije varias veces 'profe, no se vaya'. Sólo me respondió: "Permítame hacerle una dedicatoria en esta postal del estadio de Newells que lleva mi nombre".
- ¿Qué conclusión te dejó?
Confirmé que es un hombre, no un dios, sencillo y tímido. Un gran hombre.


fuente www.lacuarta.cl

 

perdimos una gran entrenador y persona una lastima