Él es el Mensajero Divino: anunció el nacimiento de Jesús y de Juan El Bautista y entregó el Corán a Mahoma. Pero no es solo un ángel mensajero pues fue quien Dios envió para explicarle al profeta Daniel el significado de sus visiones, por lo cual Gabriel es también un ángel asociado a la clarividencia; y a la muerte, pues acompaña a las almas de los fallecidos según el misticismo judío Él es el Mensajero Divino: el que anunció el nacimiento de Jesucristo y de Juan El Bautista, el que fue enviado por Dios para explicarle al profeta Daniel el significado de sus visiones y el que dictó el Corán a Mahoma. Su nombre (Gebher en el original hebreo) ha sido interpretado de formas variadas pero semejantes en sentido: Fortaleza de Dios, Dios es mi fuerza, Hombre de Dios, Héroe de Dios; o, en el caso de su nombre islámico Djibril, como El Espíritu Fiel. Varios son también los títulos que se le han dado para expresar sus funciones y los atributos que forman su esencia: Ángel de la Anunciación, Ángel de la Revelación, Ángel de la Verdad, Ángel de la Pureza, Ángel de la Encarnación, Ángel de la Resurrección, Ángel del Gozo, Portador de Buenas Nuevas, Ángel del Consuelo, Ángel de la Misericordia[1] En la tradición judía existe la creencia de que Gabriel se sienta a la izquierda de Dios y es gobernador del Edén; dentro de la angeología actual, hay quienes sostienen que es jefe de los Ángeles de la Guarda y, ya en un marco de consenso general, que es también él quien dirige a los Ángeles de la Pureza, papel éste originado en la asociación que se ha hecho de él con la Virgen María. Muchos expertos en el tema de los ángeles han planteado que, en virtud de su rol de Mensajero Divino, Gabriel es el arcángel más cercano a la Humanidad, por lo cual se le ha llamado Embajador Jefe ante la Humanidad. Ligado igualmente a su papel de comunicador, se ha planteado que Gabriel es el responsable de cierto tipo de gestión en las relaciones humanos/ángeles, humanos/Naturaleza y humanos/humanos. Dentro del esoterismo moderno, se considera a Gabriel como el arcángel de las emociones[2], la fecundidad, la creatividad y las artes, además de cómo el ángel de la pureza, el nacimiento, la resurrección, las revelaciones y todos los otros papeles que se le han atribuido en el marco del cristianismo. Inherente a todo lo anterior es el hecho de que, la ayuda espiritual que Gabriel puede brindar a los seres humanos, reside principalmente en el poder que tiene para conducirlos hacia un camino de purificación en el que los sentimientos y las emociones puras van creciendo cada vez más en compañía de los pensamientos elevados, encaminando así al alma individual hacia la bondad y el amor de El Creador, de modo que, en el transitar por dicho sendero, los vicios, el odio, los hábitos mundanos y todo ese tipo de cosas van quedando atrás, no ya en virtud de un proceso de represión sino en virtud de un proceso en el que la inspiración espiritual ha ido haciendo que las tendencias de la luz vayan progresivamente reemplazando a las tendencias de la oscuridad, todo a modo de una alquimia energética de ascensión espiritual en la cual la labor del arcángel Gabriel ha seguido una dinámica intrínsecamente asociada a incrementar recuperando en los casos en que se ha perdido la inocencia[3], la pureza y la alegría propia de aquellos primeros años de vida. Cerrando ya este perfil introductorio, cabe mostrar cómo la importancia del arcángel Gabriel se ha visto plasmada en la multitud de textos religiosos[4] dentro de los cuales aparece, textos de los cuales los siguientes son solo algunos: Daniel 8:16; 9:21 Lucas 1:19; 1:26 3 Baruch 4:7 1 Enoch 9:1; 10:9; 20:7; 40:9; 54:6; 71:8-9,13 2 Enoch 21:3,5; 24:1; 71:11 (28 Recension A); 72:1,3,8-9 (Recension A) 3 Enoch 14:4 (como Ángel del Fuego); 17:3 Apocalipsis de Ezra 2:1; 4:7; 6:2 Apocalipsis de Adan y Eva 40:2 Oráculos sibilinos 2:215; 8:455 Testamento de Salomón 18:6 (74 in Conybeare) Visión de Ezra, verso 56 Apocalipsis de Elijah 5:5 Testamento de Jacob 5:13 Preguntas de Ezra (Recension B) verso 11 (Manuscritos de Nag Hammadi) Evangelio de los egipcios 52:23; 53:6; 57:7; 64:26 (Manuscritos de Nag Hammadi) Zostrianos 57:9; 58:22 Oraciones: Gloriosísimo Príncipe de la Corte Celestial y excelentísimo San Gabriel, primer ministro de Dios, amigo de Jesucristo y muy favorecido por su santísima madre defensor de la iglesia y abogado de los hombres, pues tanto favorecéis a vuestros devotos, haced que yo os sepa amar y servir. Oh! Dios que entre todos los ángeles elegisteis al Arcángel Gabriel, para anunciar el misterio de tu Encarnación, concédenos benignamente que los que celebramos su festividad en la tierra, experimentemos su patrocinio en el cielo. Arcángel Gabriel, alcánzame del Señor lo que deseo y pido para mayor gloria y honra suya y provecho de mi alma. Amen San Gabriel Arcángel, danos tu esperanza, Santo Ángel de la Encarnación, Fiel mensajero de Dios, Ser de luz mediadora, protege a la familia, Embajador de la pureza, Ángel de la esperanza y de la paz, Protector de todos los siervos y siervas de Dios, Guardián del santo Bautismo, patrono de las embarazadas anúncianos buenas noticias. Príncipe, ángel de la encarnación, fiel mensajero de Dios, abre nuestros oídos hasta para los más leves susurros de Dios y toques de su gracia divina. Permanece siempre con nosotros para que comprendamos la palabra sabia y sigamos sus inspiraciones en la resolución de los conflictos. Guía nuestro camino con tu luz. Amén. Invocación a san Gabriel : Una manera (hay algunas) bastante eficiente para invocarlo es la siguiente: Asegúrese de que sea miércoles, de preferencia a las siguientes horas: 2:00 am, 9:00 am, 4:00 pm, 11:00 pm Procure estar solo y no ser interrumpido. Tome una vela blanca con el suficiente grosor para que la vela se mantenga en pie; y, luego de rezar, tome la vela y frótela con ambas manos desde la base hasta la parte de arriba: repita esto siete veces. Tome una cartulina blanca, dibuje el sello del arcángel Gabriel en la parte superior de la cartulina (se recomienda que ocupe el 1/2 superior o el 1/3 superior de la cartulina); y, en la parte inferior, escriba sus peticiones, lo que le quiere decir al arcángel Gabriel y un agradecimiento por estar en su camino Encienda la vela blanca. Tome la cartulina blanca, lea las peticiones y, cuando termine, agradézcale al arcángel por estar en su camino y estar allí presente. Nota: en una variante, no lee la carta y pasa directamente al siguiente paso Doble la cartulina y póngala debajo de la vela. Recite una de las oraciones conocidas (elección personal) al arcángel Gabriel. Nota: la oración, o se la sabrá de memoria, o la tendrá anotada en un papel aparte de la cartulina. Cierre los ojos, ore interiormente, intente sentir a Dios y de ser posible al arcángel, visualice que se ha cumplido su petición, agradezca en su interior a Dios y a Gabriel y abra los ojos. Queme el papel antes de que la vela blanca se consuma. Deje que la vela se consuma, váyase si la vela se demora mucho y no desea esperar. Nota: si no ve cumplida su petición, repítala todos los miércoles que sean necesarios, intentando hacerlo siempre con la mayor fe posible y en un estado de paz interior y ausencia de ira, odio, rencor o mala voluntad hacia el prójimo. Y algo muy importante: recuerde que Gabriel es el arcángel de la pureza, por lo cual sería de enorme utilidad que, durante los días de invocación, ayune y se prive de pensar en sexo, dinero y cosas mundanas, además de hacer todo lo antes dicho. Sello de Invocación: Espero que les aya gustado... :inocente::inocente: