Propietaria del documento agradeció valioso gesto de Sergio Candia. Dinero era para cancelar una cuantiosa deuda. sergio valenzuela "Lo que no es de uno, hay que devolverlo. Así me enseñaron a mí. Uno tiene que ser honrado y ganarse sus pesos día a día", dice Sergio Candia Vidal (37), chofer de la línea de colectivos 11 A de Temuco. En su mirada se refleja la satisfacción de haber hecho lo correcto. En uno de los asientos traseros de su vehículo encontró un cheque al portador por más de dos millones de pesos. Podría haber tenido una generosa Navidad y pasar un holgado Año Nuevo, pero él no dudó un segundo: ese dinero tenía un dueño y había que devolverlo. EJEMPLO El increíble ejemplo de honradez se gestó cerca de las 9.30 horas del martes en el sector céntrico de Temuco. Sergio Candia se detuvo para recoger a una pasajera y en el instante en que abría la puerta trasera se fijó en un sobre blanco olvidado sobre los asientos. Lo tomó, lo guardó y siguió su viaje. Instantes después lo abrió y comprobó que se trataba de un cheque al portador por un valor de 2 millones 79 mil pesos. El colectivero de la línea 11 supo de inmediato lo que tenía que hacer: intentar dar con el propietario del cheque y entregárselo. "Eso es lo que correspondía hacer. Si algo no es mío y no viene de buena manera, hay que devolverlo o buscar la posibilidad de entregarlo a la persona que es dueña del cheque", indicó Sergio. ENTREGA Desde el instante en que encontró el cheque, el colectivero inició averiguaciones para dar con el propietario. Después de múltiples consultas determinó que se trataba de una mujer que vivía cerca del terminal de la línea 11 en el sector de Campos Deportivos. La misma mujer ya se había contactado con la línea y su primera alegría fue saber que el chofer que encontró el cheque la buscaba para entregárselo. "La señora estaba muy nerviosa porque se trataba de un pago importante que tenía que hacer. Quedó agradecida por haber recuperado su cheque", dice el conductor. ESFORZADO El colectivero de la línea 11 es casado y padre de cuatro hijos. Dos de ellos estudian en el Liceo Comercial del Desarrollo y son destacados alumnos con excelentes promedios. Dice que a menudo encuentra teléfonos celulares y documentos olvidados por pasajeros en los asientos de su vehículo. "La última vez tuvo un celular touch como trece días en el auto, esperando a que el dueño llamara para poder devolverlo. Eso es lo que corresponde", sostiene. Alicia Riffo Roa, representante legal de la línea 11 explica que existe un procedimiento para estos casos: cada conductor informa del hallazgo de cosas olvidadas y siempre están disponibles para recuperarlas. Sin duda este conductor entrega una lección de honestidad hacia la comunidad. Fuente: Austral Temuco http://www.australtemuco.cl/prontus4_noticias/site/artic/20101224/pags/20101224001806.html
waaa notable el caballero gente como esa es lo q necesita este mundo de mierda lleno de vilolencia y asesinatos jajaja me fui en la profunda xD.... buen aporte