Hay una serie de factores que pueden jugar un papel en el desarrollo de la depresión, incluyendo las influencias genéticas, ambientales, emocionales, psicológicas y biológicas. De acuerdo con un neurocientífico integrador,la depresión podría ser incluso una forma de enfermedad infecciosa. Algunas investigaciones sugieren que la inflamación puede jugar un papel importante en el desarrollo de la depresión. Esta investigación se ha centrado en los marcadores inflamatorios en la sangre y en la depresión acompañada de dolencias físicas que causan una reacción inmune. Pero según una nueva investigación, la inflamación cerebral que se produce independientemente de la enfermedad físicapuede ser altamente correlacionada con la depresión clínica. Los pacientes con depresión presentan un aumento del 30 por ciento en ciertos marcadores de inflamación cerebral, en comparación con un grupo de pacientes sin depresión, según un estudio del Centro para la Adicción y Salud Mental (CAMH, Center for Addiction and Mental Health) de la Universidad de Toronto. Este descubrimiento proporciona la evidencia más convincente hasta la fecha sobre la inflamación del cerebro durante un episodio depresivo mayor, el autor principal del estudio, el Dr. Jeffrey Meyer dijo en un comunicado. Esta es la primera evidencia definitiva que se encuentra en el cerebro. El equipo de investigación le tomó escáneres cerebrales a 20 participantes del estudio que tenían depresión (pero eran de alguna forma saludables), y a 20 participantes sanos (sin depresión). Por medio de la Tomografía por Emisión de Positrones (PET), fueron capaces de medir la activación de las células inmunes (microglía) que juegan un papel clave en la activación de la respuesta inflamatoria del cerebro. Los investigadores encontraron niveles significativamente elevados de inflamación cerebral entre las personas con depresión,con las tasas más altas de inflamación entre las personas con depresión más severa. La depresión es una enfermedad compleja y sabemos que se necesita más que un cambio biológico para que alguien tenga un episodio, dijo el Dr. Meyer. Pero ahora creemos que la inflamación en el cerebro es uno de esos cambios y eso es un gran paso. Explicaron que la inflamación es una respuesta que el cerebro utiliza para protegerse a sí mismo, pero si se genera demasiada inflamación pueden causarse lesiones, que conducen a síntomas como el mal humor y la dificultad para dormir. Investigaciones anteriores han relacionado la inflamación producto de condiciones de salud físicas como el cáncer y las enfermedades autoinmunes con el desarrollo de síntomas depresivos, pero la nueva investigación es la primera en demostrar que la inflamación puede desempeñar un papel importante en la depresión, incluso en ausencia de una enfermedad física. Los tratamientos actuales para la depresión no tratan directamente la inflamación. Aparte de eso, alrededor del 10 por ciento de los pacientes que usan antidepresivos no responden al tratamiento, y otro 20 a 30 por ciento no responden al primer tratamiento antidepresivo. Este descubrimiento tiene implicaciones importantes para poder desarrollar nuevos tratamientos para todas esas personas que sufren de depresión, dice el Dr. Meyer, quien también participa de un Canada Research Chair, que son prestigiosas cátedras de investigación universitaria, en este caso de la neuroquímica de la depresión mayor. Proporciona un nuevo objetivo potencial ya sea para revertir la inflamación del cerebro o para dedicarse a reparaciones que den mejores resultados, con la meta de aliviar los síntomas. fuente:http://www.accionpreferente.com/cie...er-causada-por-una-inflamacion-en-el-cerebro/
