El 'Niño Maravilla' que nadie conoce Tímido fuera del campo y hombre de pocas palabras, el chileno parece un calco de Leo Messi Alexis Sánchez ha trabajado duro para llegar muy lejos EFE Soy encarador por naturaleza. Y aprendí a jugar descalzo. Por eso corro así, a los saltos. Me acostumbré a ir esquivando piedras del piso. Tenía 16 años, sólo 13 minutos en Primera, y muy a su pesar, ya acaparaba la atención de los periodistas. Todos querían hablar con él, saber más de ese chaval que acababa de debutar y que había sido clave en el 5 a 4 de Cobreloa sobre Temuco. Fama no le faltaba. Tanto en Calama como en Tocopilla, el pueblo donde nació, sus regates generaban admiración. Estoy feliz, pero no me gusta hablar, agregaba, haciendo un esfuerzo. El mismo que generó idéntica fascinación en su primer partido como titular en River, el que ganó lo que jugó en el Colo Colo, el que Daniel Passarella pidió a gritos y el que el presidente de Udinese cotizó apenas lo adquirió en 35.000.000 de dólares. Conviví con Alexis en cada entrenamiento de cada día de su paso por River. Crack precoz, aún hoy Alexis le huye a los micrófonos. Sufre la exposición. Es toda timidez. Prefiere hablar en los campos de juego. Ya cuando estaba en la Escuela de la Universidad Católica en Rancagua, sus malabares con el balón y su potencial marcaban la diferencia. Al punto tal que, reconoció, muchas veces se sintió marginado. Porque yo regateaba a todos, ellos se enojaban y no me dejaban jugar, contó hace años. Eran días en los que aún no era el `Niño Maravilla¿, pero igual tenía apodo: `Dilla¿, como todavía le llaman sus amigos. Decían que me parecía a una ardilla, ya que andaba arriba de los árboles bajando los balones que se nos colgaban. Por aquellos años, ya recibía citaciones para las selecciones juveniles de Chile. Estuvo cerca de jugar en la Argentina, pero ni en River ni en Boca: en el humilde Altos Hornos Zapla. En un amistoso que el equipo jujeño organizó contra un combinado de la ciudad chilena de Taltal, Alexis Sánchez jugó sólo 45' y convirtió siete goles. Pero el chavalito prefirió no separarse de su mamá Martina ni de sus hermanos Marjorie, Humberto y Tamara. A su madre, la venta de pescado no le daba rédito suficiente como para que Alexis y sus hermanos tuvieran una vida con muchos privilegios. Al contrario, había que cuidar cada zapatilla por lo que costaba adquirirla. Entonces aceptó jugar en Cobreloa. Su sueño era triunfar en el fútbol y poder ayudar a sus afectos. Enseguida, en Chile vieron en su juego un proyecto de lo más interesante. Nacido en Tocopilla el 19 de diciembre de 1988, debutó en Primera de la mano de Nelson Acosta el 12 de febrero del 2005. Y tras ir al Sudamericano sub 17 de Venezuela, Acosta lo citó para un partido de eliminatorias contra Brasil de cara al Mundial del 2006. En mayo de ese año, poco antes de la Copa del Mundo, el Udinese le ganó el pulso al Werder Bremen y al Villarreal y se quedó con el joven talento. Y el 'Niño Maravilla' ya no paró de crecer. El Udinese lo compró en su momento por 3 millones de dólares, lo prestó a Colo Colo y allí enamoró al entrenador Claudio Borghi. Precisamente, el DT lo bautizó 'perro nuevo' porque al llegar a los entrenamientos buscaba la pelota y empezaba a correr sin parar. Ese niño que a los siete años jugaba contra adultos pasó ahora del piso de tierra y las paredes de barro que conformaron la vivienda familiar en Tocopilla, una humilde ciudad costera del norte de Chile, a ser elegido por Nike como la imagen de la marca en Sudamérica. Del debut promisorio en Cobreloa, al canto chileeeeno, chileeeno. El pequeño que dejó hace tiempo de jugar descalzo y entre las piedras para triunfar en el Udinese. Habla poquito y nada el 'Niño Maravilla'. Pero de todas formas es una especie de jugar del pueblo para los transandinos, el símbolo de la camada de nuevas figuras que hacía rato no aparecían, luego de los Zamorano y Salas. Un jugador absolutamente desequilibrante, que conoció Barcelona en el 2007, cuando viajó a operarse de una rotura de ligamento de tobillo con el doctor Cugat. Estuvo 10 días en la Ciudad Condal. E impactado por la ciudad, se prometió que regresaría como jugador blaugrana. En junio del 2008, antes de irse a Italia, Alexis definió un contraataque furioso a alta velocidad y le aseguró a River el liderazgo en el campeonato durante una victoria por 2 a 1 ante Colón. Fue mi último contacto con el 'Niño Maravilla'. El de las botas amarillas. El que iba a ser el 'piu grande'. Su otra gran pasión: las canciones románticas de Marco Antonio Solís El chileno Alexis Sánchez, fanático del chat y navegador de la web, tuvo su fotoblog cuando aún no era tan conocido. Pero una idolatría reflejada en miles de visitas le obligaron a cerrarlo. Escuchar música se convirtió en su hobby más conocido, aún a día de hoy. De hecho, en su Ipod tiene miles de canciones y su estilo musical es del todo ecléctico, ya que va del pop de Backstreet Boys o al rock duro de Metalica. Pero donde hace un aparte es en las versiones románticas del compositor mexicano Marco Antonio Solís, confesándose un gran fan. De hecho, si al final Alexis Sánchez acaba fichando por el FC Barcelona y va a la gira americana podría coincidir con él el día 6 de agosto en Texas donde tiene programado el cantante mexicano un concierto en Odessa.
me cago de la risa cuando se pone esos lentes de chuk norris !!!!!!! "teni" que puro dejar en la banca a pedrito,aparte de modular y hablar un poco mas con la prensa
para que vean algunos que la vida de futbolista no es tan facil como piensan sacrificas toda tu infancia y juventud y recien despues de eso cocechas siempre y cuando seas bueno .... se agradece
No es mi estilo de jugador preferido, pero es chileno el wn y hay q apoyarlo... asi q ojala q sigue elevando el nivel en el barça. Pd: le gustaba marco antonio solis xDD. lo mejor de todo el post jajajjaj