Las protestas de Greenpeace son masivamente conocidas por su valentía y su originalidad. Muchas de ellas pasaron a la historia por su perfil políticamente incorrecto y por llevarse a cabo en el lugar y el momento indicados. La organización ecologista nacida en 1971 acude a disfraces, carteles y demás caracterizaciones en zonas boscosas y hasta en palacios legislativos. Sin avisar, irrumpen allí para reclamar por causas que siempre tienen que ver con la defensa del medio ambiente. Greenpeace es una de las ONG ambientalistas más importantes y cuenta con oficinas en 41 países del mundo. Osos polares contra la exploración en el Ártico El objetivo era parar la exploración en el Ártico por parte de una compañía petrolera. Fieles a su estilo, no lo hicieron con una protesta clásica. Para ir contra Shell, más de 50 activistas de Greenpeace bloquearon una estación de servicio en en Dock Sud (Buenos Aires) vestidos como osos polares. Posicionados sobre los surtidores, impidieron la carga de naftas en el lugar. La organización denunció allí que la empresa se aprovechaba del derretimiento del hielo para perforar en búsqueda de uno de los combustibles que provocan el cambio climático. Rapel en el Parlamento mexicano En México, dos activistas de Greenpeace se descolgaron desde uno de los palcos a través de una soga en pleno Parlamento. Como si fuera una práctica de rapel en medio de la Legislatura, bajaron con carteles que rezaban: Maíz transgénico, traición a la Patria. Greenpeace. Las mujeres lo hicieron cuando los senadores votaban los nombramientos de embajadores las sedes diplomáticas en Europa designados por el presidente Enrique Peña Nieto. Las manifestantes lograron exhibir las leyendas durante alrededor de un minuto. Ambas fueron desalojadas luego por el personal de seguridad del recinto. En bikini, contra las papeleras y entre los presidentes Evangelina Carrozo saltó a la fama luego de inmiscuirse envuelta en su bikini de reina de comparsa en la foto oficial de la Cumbre Unión Europea y América Latina 2006, en Austria. Ella, que bailaba cada año en Ara Yeví, se unió a Greenpeace para mostrar en medio del acto un cartel que decía Basta de papeleras contaminantes. La protesta fue en contra de las papeleras instaladas en Fray Bentos, Uruguay, pertenecientes a la finlandesa Botnia. La joven, que en ese entonces tenía 25 años, captó al atención tanto de los mandatarios presentes como de la prensa internacional. En bici y escalera, contra las plantas nucleares La operación se llamó prueba pacífica de esfuerzo y se realizó en 2012 en la planta nuclear de Forsmark, en Suecia. El fin de la misma, llamar la atención sobre la falta de seguridad en este tipo de compañías. Unos cincuenta activistas de Greenpeace lograron ingresar a las áreas restringidas para mostrar sus deficiencias. Solamente con escaleras consiguieron apostarse en los postes de luz y, con bicicletas, llegaron hasta otros sectores. La organización ecologista denunció que la llegada de sus miembros a ciertos lugares de esta empresa dejó en evidencia el peligro que ésta representa para la seguridad y la salud de la población. Orangutanes denuncian a Kentucky Fried Chicken Hablar de Kentucky Fried Chicken remite indudablemente a los clásicos pollos fritos que esta cadena ofrece a lo largo y a lo ancho de varios países del mundo. Para Greenpeace es algo más: en la India, la organización denunció que los paquetes y embalajes que allí se utilizan fomentan la deforestación de la selva indonesia. Disfrazados de orangutanes, los activistas protestaron frente a una de las filiales de la compañía y aseguraron que pone en serio peligro la vida de animales como el tigre de Sumatra y de los mencionados monos. Espuma, Levi's, México y Estados Unidos Estados Unidos fue escenario de una importante protesta de Greenpeace en 2012 cuando activistas denunciaron la contaminación de ríos de México causada por las descargas tóxicas de fábricas que producen para Levis. En el informe Hilos tóxicos, la ONG aseguró que Lavamex, en Aguascalientes y Kaltex, en San Juan del Río, descargaban sustancias prohibidas en aguas residuales. Ambas plantas se dedican a la producción, lavado y teñido de productos de esta firma. Para llevar a cabo su protesta, los miembros de Greenpeace formaron un río de espuma frente a la entrada principal de una oficina de la marca en California. Desde las alturas, en Madrid En Madrid, Greenpeace se manifestó contra la empresa de indumentaria Zara, al denunciar en 2012 que utilizaban productos químicos tóxicos en la realización de sus prendas. Dos escaladores se descolgaron en el frente de la empresa con un cartel que decía: "Zara, únete a la moda sin tóxicos". Otros cuatro manifestantes se caracterizaron como maniquíes y se apostaron frente a la compañía para combatir el uso de productos que, según afirmaron, pueden causar cáncer o generar alteraciones hormonales. La protesta se dio en el marco de la presentación del informe "Puntadas Tóxicas". Papá Noel vengador Contra la exploración petrolera en el Ártico, Greenpeace protestó también en Colombia. En este caso, alrededor de siete activistas se disfrazaron de Papá Noel y mostraron un cartel con el siguiente mensaje: "Coca Cola destruye el Ártico". La organización denunció que la empresa de bebidas era socia de Shell. En la manifestación, varios miembros de la ONG se acostaron a cada lado de las ruedas de los camiones de Coca Cola e impidieron su salida. Como parte de esta campaña bautizada Papá Noel vengador, Greenpeace recolectó miles de firmas que pedían la detención de la exploración. Arte contra la contaminación del agua Trapos Sucios - Recargado fue el nombre con que se bautizó al informe que alertaba sobre la contaminación causada por firmas de indumentaria. Tras su publicación, Greenpeace realizó una particular protesta frente al World Fashion Centre en Ámsterdam, Holanda. La organización denunció que primeras marcas de ropa como Ralph Lauren o Calvin Klein contaminaban las aguas (aún sin saberlo) con los productos químicos que utilizaban. En esta ocasión la ONG se unió a artistas de PlanetStreet y entre ambas crearon una pintura callejera alusiva en tres dimensiones. Allí, parte de la infraestructura se mezcló con los acrílicos que creaban nuevas formas en el suelo.
todas son una exelente forma de hacer notar, la falta de interes de las naciones en pro de una nueva actitud a estos nuevos tiempos... sino , estos recursos teatrales y osados , a los que llega greenpeace no serian necesarios , se debe remecer la conciencia y esto es algo ke debe partir por casa , grax Wario
no les compro a las organizaciones , al fin y al cabo todas se mueven y se venden por el maldito DIABLO VERDE ... saludos
he escuchado eso mas de una vez xd pero pienso q si aunque ganaran millones esas organizaciones, igualmente movilizan masas a causas realmente buenas y ayudan al planeta quizás mucho mas q otros ...creo eso y espero de todo corazón q sea así xd
bastante notable las acciones q practican estas personas aunque esta misma organizacion ha sido criticada x sus propios miembros (ahora ex) x su poca eficacia al momento de los resultados como x ejemplo el compadre q defiende las ballenas en el pacifico con un barco y ataca directamente los barcos balleneros
Que decir mas que sacarse el sombrero a ver actos como estos, si de alguna manera no son eficaces en los resultados, no escatiman en nada con tal de hacerse notar y queda demostrado.