Las flores de esta especie de orquídea son únicas, no sólo por su singular belleza, color y formas excepcionales, sino también por la efectividad que poseen para atraer insectos. Su labelo imita al abdomen de una abeja hembra, atrayendo a abejas macho para que polinicen la flor. Sorprendente. La planta puede medir hasta 50 cm de alto y se distribuye en terrenos húmedos y en herbazales desde el Mediterráneo, hasta el Cáucaso. Fuente: la reserva