De la Negra Yolanda a Mis Vecinitas de la Pensión

Ya con la negrita le habíamos tomado el ritmo al culiar bien rico, por lo menos nos pegábamos un polvo día por medio, siempre que se escuchara poquito y "que no nos vayan a pillar papi" me susurraba mientras le metía y sacaba el tronco de esa concha deliciosa...

Llegaron las Fiestas Patrias y el webeo estaba programado desde hace semanas. Cuota por persona, más los que llegaran invitados, teníamos asegurado asado y copete los 3 días que teníamos de fiesta. En eso que estaba loco mirando como Yolandita se rajaba bailando cueca con los más viejos del caserío, se me acerca la Rubia Pantruca (la misma del pololo que se estaba comiendo a la negra) y me dice "y tú no bailas???".. no, le dije, nunca aprendí a bailar cueca del centro, yo bailaba la cueca nortina, la zamacueca. "es que Raúl se curó y se fue e acostar, por qué no bailamos???" me dice la rubia, igual media arriba de la pelota, y le dije ok, pero sin reírse...

Traté de bailar lo mejor que pude y en verdad, como me enseñaron de chico que a una mujer no se le podía hacer un desaire en un baile, estaba más concentrado en mirar a la rucia que en bailar en forma decente. Tenía una pie bien blanca y unas tetas bien firmes, acinturada. Usaba unos jeans y blusa roja y un collet Blanco (por las fiestas). Cuando me miraba quedaba pegada con sus ojos verdes y yo,entre que me ponía nervioso, miraba pal lado y estaba la negra un tanto seria porque bailaba con la rucia.. la verdad estaba disfrutando el baile, cuando ya terminaba la cueca y empieza a sonar una cumbia (raro en fiestas patrias). En eso se desata la rucia y se suelta el pelo, un rubio casi platinado que en verdad llamaba la atención. No me di ni cuenta cuando se me acerca y bien pegada a mi me dice "esto yo no lo sé bailar muy bien, así que te va a tocar enseñarme"... en eso y sintiendo el calorcito se me empieza a parar, y como usaba bóxer se me notaba. Tratando de disimular la erección, trataba de alejarme, mientras que la rucia se da vuelta pegando su culito no tan rico como el de la negra, pero bien firme y paradito y sobre la misma la rucia me mira y me dice "nos pusimos todos contentos parece" y me guiña un ojo... miro para todos lados un poco nervioso y veo que Yolanda agarraba su chaqueta y se fue y en las mesas quedaban la otra pareja de la pensión dándose calugazos un tanto ebrios y un viejo que estaba raja curao. La rucia se da vuelta y mirándome me dice "yo me llamo Rafaela y estoy re caliente. Te daría como caja negro rico"...

Me la llevo a la pieza y nos sacamos la ropa como un par de adolecentes. Mi verga la tenía durísima y sin siquiera hablarnos, desnudos y yo sobre ella, empiezo a hundirle el glande en una concha depilada y rosadita, apretandole las piernas y besándonos como locos. En eso que estaba por entrar me dice "si no andas con condón me da lo mismo, por favor métemelo ahora yá" y antes que siguiera hablando se lo entierro con fuerza, dejando escapar un gemido tirado para grito, mientras masajeaba sus tetas ricas y besando su cuello. En eso entrelaza sus piernas en mi espalda y me grita "por favor no pareeees", empujando con mas fuerzas, sintiendo como mis testículos golpeaba en ese culito redondito. Sonaba la humedad del mete y saca cuando siento que tiene un orgasmo y me entierra las uñas en la espalda. Yo dejo de penetrarla y lo saco despacio, cuando sobre la misma me dice "no creas que te voy a dejar así" y se pone en 4, abriéndose el culito rico y masajeándose la concha diciendome "por favor llénamelo"... yo con las venas marcadas de lo duro que estaba, apoyo el glande en la entrada y tomándola de las caderas se la entierro con fuerza, escuchando un grito estremecedor mientras se masturbaba. Sigo con el ritmo aguantando lo más que podía, mientras su pelo se sacudía como una bandera, por lo que la tomo del pelo con firmeza y mientras le daba unas nalgadas que marcaba mis dedos en su culo me grita "por favor no pareeeees que me vooooyyyyyy" y en eso siento otro orgasmo, cayendo rendida en la cama. yo con mi tronco duro y apoyándome con mis puños en la cama la seguí taladrando, haciéndola saltar en la cama, viendo como sus ojos estaban blancos de placer y su boca abierta dejando caer un manantial de saliva.

el cuadro se debió ver hermoso, yo taladrándola como una perra y ella afirmándose de mis brazos mientras levantaba su culito rico para que la siguiera penetrando. Llevábamos unos 10 minutos en esa posición cuando ya no aguanté más y le digo que iba a explotar y en eso mismo y estando todo mi pene dentro suyo apreta los glúteos sin dejarlo sacar y me miraba riéndose y siguiendo al mismo tiempo soltando y apretando, soltando y apretando, sintiendo que el tronco me tiritaba de placer, cayendo sobre ella....

Me salgo y me acuesto al lado. La rucia me miraba y me dice "puta que culiay rico negro, esta wea la vamos a repetir cada vez que el wn de Raúl se cure... así que compra harto copete jajajaja". Se viste y se va, dejándome con el tronco duro duro...

 

jajaja, para que no se decepcionen, esta wea pasó hace unos 20 años o un poco más, ni idea donde siguen estas hembras. un abrazo y ya les contaré más historias de esa pensión...