Spoiler PARTE 1 Los padres de Alfredo se divorciaron cuando él tenía 8 años y acabó viviendo con su padre, Don Alfredo, con el fin de permanecer en la prestigiosa preparatoria a la que asistía. Cuando creció, pasaba los veranos con su madre. Al cumplir 18 años, volvió a casa para enterarse que su padre se había comprometido durante el verano con una mujer con la que trabajaba de nombre Maritza. Alfredo la había conocido antes en una fiesta de la oficina organizada en su casa. Pensó que sólo era otro de los breves coqueteos de su padre con otra zorra voluptuosa. La madre de Alfredo a menudo lo molestaba cuando cachaba a Júnior comiéndose con los ojos una mujer de pechos grandes. "Eres igual que tu padre", decía. "Cegado por los grandes melones" Por otro lado, su madre tenía un par bastante decente y reconoció que era una característica que todas las novias de su padre tenían en común: grandes pechos. Maritza se mudó a su casa unos meses antes de la boda. Júnior estaba ocupado con la escuela así que no interactuaba mucho con ella. Sin embargo, él se dio cuenta que le gustaba usar jeans ajustados, que mostraran su amplio culo y blusas ajustadas que dejaran ver su enormes pechos. Al padre de Júnior le encantaba su forma de vestir y apenas podía quitarle las manos de encima. Júnior estaba seguro de que tan pronto como se fuera a la escuela su padre se la cogería en la mesa de la cocina. Por mucho que él no quisiera hacer hincapié en la actividad sexual de su padre, no podía dejar de pensar en Maritza. Ella era muy hermosa. Había una oscura sensualidad en sus grandes ojos castaños. Podía ver porque su padre se enamoró de ella con tanta facilidad. Ciertamente, sus enormes tetas habían llamado su atención, pero era más que eso. Ella era un objeto de deseo. Una noche Júnior despertó del más intenso de los sueños. Su ropa estaba empapada de semen. Soñó que estaba tomando una ducha y Maritza se unía a él. Su pelo largo y negro estaba peinado en una cola de caballo. Él la sujetaba mientras se la cogía por detrás. Él escuchaba sus orgásmicos gritos mientras se hundía más y más en su afeitado agujero. Mientras recuperaba el aliento, se dio cuenta de que los gritos de orgasmo eran reales. Su padre y Maritza tenían una intensa actividad sexual. Habían salido a cenar y probablemente estaban demasiado borrachos como para contener su pasión en su presencia. A la mañana siguiente, Júnior salió a hurtadillas de la casa, estaba demasiado avergonzado para ver a su padre y a Maritza. Cuando llegó a la escuela, se dio cuenta de que había olvidó de su almuerzo. "Voy a volver a casa al mediodía", pensó. Júnior no vio coches en la entrada por lo que entró directamente. Fue a la cocina y agarró la bolsa de su almuerzo. Dio media vuelta y ya estaba casi fuera de la casa cuando sonó el teléfono. Contestó y se dio cuenta Maritza también lo había hecho. Ella habló primero. Estaba a punto de colgar cuando oyó a un hombre en la línea decir: "¿Eres la puta de la que tanto he oído hablar?" Los ojos de Júnior se abrieron con sorpresa ¿Papá? Sí respondió ella con recato. "Habla Sophie". "¿Sophie?", Pensó Júnior. "¿Recibiste la ropa que te mandé?" Hubo una pausa. "Acabo de ver el paquete." "¿Por qué no te lo pruebas? A ver si te queda. "Júnior se estaba poniendo caliente. Su curiosidad despertó. Parecía que ya no tenía el control de sus acciones. Se quedó al teléfono y subió las escaleras en silencio. La puerta de su recamara estaba abierta. Desde donde estaba escondido, tenía una visión completa de Maritza sosteniendo un mini vestido negro. "¿Estás desnuda?" Preguntó su padre. El corazón Júnior dio un vuelco. "Casi", respondió ella con una voz sexy. Los ojos de Júnior se centraron en sus sexis tacones, sus pantorrillas y sus musculosos muslos, su grande y redondo culo desnudo. Tenía la más bonita figura de reloj de arena. Se puso el baby doll. Le quedaba un poco apretado y daba forma a su increíbles curvas. "¿Cómo se te ve, Sophie?." Ella sonrío. Me veo como una puta caliente, te vas a venir en los pantalones cuando me veas. " "Prefiero venirme en tu boca, puta. ¿Quieres que te coja por tu linda boca? " Maritza asentía con la cabeza. "Quiero que te cojas mi boquita." "Sabes por donde te la voy a meter después, ¿verdad, puta?" "Me la vas a meter por el culo." Así es, nena, por tu grande y hermoso culo. Nos vemos en 20 minutos ". Júnior se fue a su habitación y se quedó en silencio. Pensó en una manera de espiarlos. Su padre llegó y se fue directamente a la recamara principal, donde Maritza estaba esperando. Para suerte de Júnior, la puerta estaba abierta y pudo ver el acto sexual. Su padre se cogió Maritza (o Sophie) y terminó en su culo, como le había prometió. Júnior no podía concentrarse en nada después de ver a su madrastra desnuda. Dos días después, el padre de Júnior había salido de la ciudad por negocios y regresaba hoy. Esa noche él y Maritza realizarían algunas fantasía que tenían que ver con un nuevo traje de cuero negro. Su teléfono celular vibró. Era un mensaje de texto:. "Te voy a estar esperando en la cama, con los ojos vendados, con el traje nuevo. Cogeme. Hazme lo que quieras, seré tu esclava.". "Oh, Dios mío, Maritza me envió un mensaje destinado a papá por error" No era la primera vez que se equivocaba, pero nunca con un mensaje así de sucio. Eso fue todo. Tenía que hacer algo. Ella era su objeto de deseo. Él haría cualquier cosa para estar con ella. Su celular vibró de nuevo. "Probablemente, sea Maritza, avergonzada." Lo revisó. Era su padre. "No pude conseguir una bodega. Necesito quedarme un día más. No llamo hasta mañana". Avisale a Maritza. " La imaginación de Júnior comenzó a volar. Él mismo no pudo haberlo planeado mejor. Su padre no vendría a casa. Maritza lo estaría esperando para ser cogida como una puta barata. Era el medio día. Necesitaba otra garantía para asegurarse de que el plan de sustituir a su padre en la cama iba a funcionar. "¡Sí, una botella de champán funcionará!" Volvió a su casa y puso a enfriar una botella de champán. Escribió una nota con la letra de su padre. "¡Quiero que estés borracha cuando llegue a casa!" Se fue y esperó hasta las cinco. Fueron las cuatro horas más largas de su vida. PARTE 2 El padre de Júnior había estado fuera de la ciudad por negocios y hoy volvía a casa . Esa noche él y Maritza llevarían a cabo una fantasía con ese cachondo vestido negro. Él no podía concentrarse en nada después de ver a su madrastra desnuda. Su celular vibró. Mensaje de texto:. "Voy a estar esperando en la cama, con los ojos vendados, con el vestido nuevo. Cógeme. Hazme lo que quieras, seré tu esclava". "Oh, Dios mío, Maritza me envió por error un mensaje destinado a papá" No era la primera vez que cometía un error, pero era la primera vez que le enviaba un mensaje sucio. Eso era todo. Tenía que hacer algo. Ella era su objeto de deseo. Él haría cualquier cosa para estar con ella. Su celular vibró de nuevo. "Probablemente, sea Maritza, avergonzada." Lo revisó. Era su padre. "No pude conseguir una bodega. Necesito quedarme un día más. No llamo hasta mañana". Avisale a Maritza. " La imaginación de Júnior comenzó a volar. Él mismo no pudo haberlo planeado mejor. Su padre no vendría a casa. Maritza lo estaría esperando para ser cogida como una puta barata. Era el medio día. Necesitaba otra garantía para asegurarse de que el plan de sustituir a su padre en la cama iba a funcionar. "¡Sí, una botella de champán funcionará!" Volvió a su casa y puso a enfriar una botella de champán. Escribió una nota con la letra de su padre. "Quiero que estés borracha cuando llegue a casa!" Se fue y esperó hasta las cinco. Fueron las cuatro horas más largas de su vida. Cuando llegó el momento, corrió a casa, subió las escaleras, y se paró en la puerta. La botella de champán estaba boca abajo en la cubeta. Con un poco de suerte, estaría borracha. Sólo necesitaba un poco de tiempo. Se quitó la ropa y se metió en la cama. "¿Eres tú, amor?" Preguntó ella. Se veía tan bien recostada en la cama. Él se agachó y agarró la orilla de su vestido. Ella abrió las piernas. Su coño estaba casi totalmente afeitado. Se inclinó y le dio a su raja húmeda un largo lenguetazo. Ella gimió cuando él comenzó a chupar su clítoris. Sabía riquísimo. Sus muslos eran tan suaves. Ella se echó hacia atrás y él le besó los pechos. Los tenía increíbles. Jugó con ellos por un rato, excitando sus pezones con pequeños mordiscos. Luego llegó el momento para el sexo. Su verga estaba tan hinchada que parecía que iba a reventar. La fue penetrando lentamente. Fue entonces cuando ella se dio cuenta de algo que algo estaba mal. Se quitó la venda y con horror vio a su hijastro montándola, sudando a chorros mientras embestía su coño. "¿Qué estás haciendo?" dijo, retorciéndose debajo de él. No pudo detener a Júnior. Continuó gimiendo y gruñendo. No llevaba condón cuando se vino dentro de ella. Seguía chorreando cuando le metió la verga en la boca. Estalló una vez más y terminó. Ella todavía estaba escupiendo grumos pegajosos de semen cuando él le dijo: "Ah, papá va a volver hasta mañana. Me dijo que me ocupara de ti mientras él no estuviera.
