El cerebro de la mujer reconoce el sudor sexual masculino

Durante mucho tiempo los científicos han debatido sobre si los seres humanos, al igual que los animales, utilizan señales químicas para transmitir su interés sexual por otras personas: las llamadas feromonas sexuales. Puesto que se trataría de una comunicación a nivel subconsciente, resulta complicado estudiarla.
En la Universidad de Rice, Houston (EEUU), la psicóloga Denise Chen y sus colegas diseñaron un experimento para comparar cómo responden las mujeres ante las diferentes formas del sudor masculino: el sudor que los hombres producen en situaciones cotidianas frente al que producen cuando se encuentran sexualmente excitados. Querían comprobar si los seres humanos reaccionan ante las feromonas contenidas en el sudor.


Chen y sus colegas pidieron a 20 hombres heterosexuales que dejaran de usar desodorantes y perfumes durante unos días. Después les pusieron unas pequeñas almohadillas bajo las axilas mientras estos contemplaban vídeos pornográficos (confirmaron con electrodos que estos varones se excitaron sexualmente viendo el porno). Con otras almohadillas, recogieron el sudor que producían en condiciones normales.


A continuación, sometieron a 19 mujeres a escáneres cerebrales a la vez que les daban a oler las muestras recogidas de sudor masculino. Utilizaron imágenes de resonancia magnética funcional (fMRI): una técnica que revela que regiones del cerebro está utilizando una persona en un momento dado (incluso si su actividad cerebral es subconsciente).


Encontraron que el cerebro de la mujer responde de forma muy diferente dependiendo del tipo de sudor inhalado. El sudor sexual, pero no el sudor normal, activa la corteza orbitofrontal derecha (el área cerebral que nos ayuda a reconocer las emociones) y la corteza fusiforme derecha (el área cerebral que nos ayuda a percibir las cosas).



También activa la parte derecha del hipotálamo. Sólo el hipotálamo está vinculado a la motivación y el comportamiento sexual.


Según la doctora Chen: “Con excepción del hipotálamo, ni la corteza orbitofrontal ni la región fusiforme se consideran asociadas a la motivación y el comportamiento sexual. Nuestros resultados implican que la información sensorial química procedente del sudor sexual está codificada en el cerebro más bien de forma holística, y no específicamente por su cualidad sexual”.

NOTA: De forma holistica quiere decir que el sistema completo se comporta de un modo distinto a la suma de sus partes. Se deduce que la respuesta o interpretación ante el sudor sexual NO tiene por que ser necesariamente de naturaleza sexual.​